“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida;
nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6, Reina-Valera, 1960).
“Yo soy [...] la vida”.
Jesús entregó su vida para que las personas
que demuestren tener fe en él puedan vivir para siempre (Juan 3:16, 36).
Además, para los que han muerto,
Jesús es “la vida” porque él los va a resucitar (Juan 5:28, 29; 11:25).