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misericordia
Jesucristo no murió para predicar todos aquellos mandamientos del viejo testamento, que sólo eran preceptos de hombres y que mandaban penas de muerte, guerras y genocidios. Jesucristo no murió para defender aquellas leyes de muerte. Pues Jesucristo dio su vida, para anular esas leyes de muerte y enseñar los verdaderos mandamientos de Dios, que son los mandamientos del Evangelio.
¿ Has leído el Evangelio alguna vez?...
¿Y si lo has leído porque no guardas con amor sus enseñanzas?...
El Evangelio de Jesucristo, vino a enseñar al mundo lo que realmente es Ley de Dios que es el Evangelio, y lo que realmente eran los preceptos de los hombres, como son, muchos de los preceptos del viejos testamento judío, que sólo eran preceptos de hombres, que querían anular la misericordia, y la misericordia es lo que Dios quiere.
Volverse de nuevo a las viejas leyes judías de muerte, después de a ver conocido los mandamientos de vida que enseña el Evangelio, es la torpeza mas grande que ha conocido la humanidad en este mundo, porque Jesucristo vino a enseñarnos, los verdaderos mandamientos de Dios.