Por eso hay que leer toda la biblia
y no despreciar porciones de ellas dando excusas vanas
Por eso hay que leer toda la biblia
y no despreciar porciones de ellas dando excusas vanas
Jesucristo no mandó predicar las biblias judaizantes que impusieron las religiones... Jesucristo mandó predicar el Evangelio... Las biblias fueron impuestas por los dictadores de las naciones, porque imponen muchos preceptos de hombres de penas de muerte y de esclavitud que les agradan a los poderosos dictadores de las naciones...
El Evangelio por el contrario les manda a los poderosos que repartan todos su bienes entre los pobres y que no maten a las personas...
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El Evangelio no es una cantinela...EL EVANGELIO ES LA LEY DE DIOS.
Y los cristianos hablamos siempre del Evangelio que es lo que Jesucristo mandó predicar:thumbup:...Eso de que hablamos lo mismo e s para los que adoraís falsas religiones, que estaís siempre con el mismo rollo...y que yo recuerde tu siempre al igual que otros aquí....que siguen falsas doctrinas...meteís mandamientos y precpetos de hombres que Jesucristo anuló.
Nadie te ha echado...EL EVANGELIO QUE ACRISOLA A TODO EL QUE HACE MALO EL CAMINO DEL SEÑOR...es el que te ha indicado....(que no tienes nada que hacer).:cursing:
La cosa que el evangelio
no dice que prediquemos lo que se quitó
si no lo que se puso en su lugar.
:thumbup:
lo que predicas son los preceptos de hombres que se quitaron según tu
Pero lo que puso en su lugar Jesus
no lo mencionas:001_huh:
solo dices que no hay que matar
eso lo sabe hasta los ateos.:laugh:
Para ocupar espacio en el foro
repiten como cotorra
No habla de las buenas nuevas del reino
el solo sabe hablar de lo que esta nulo abolido anticuado pasado.:lol:
Jesús mandó a predicar el reino y lo que el dijo
no lo que abolió:wink::001_smile:
Kimo.
lo que predicas son los preceptos de hombres que se quitaron según tu.
............
Jaaa.
Jaaa
Jaaa. Que yo predicó mandamientos y preceptos de hombres??.
Eso lo dejo para los señores de las atalayas..... que sois especialistas en la mentira y en predicar cosas que Jesucristo nunca mandó.