Porcia
03-mar.-2008, 06:21
Según datos de organizaciones civiles, cada año en México son registrados como robados o desaparecidos un promedio de 20.000 casos de niños; la mayoría de ellos tiene como destino la prostitución, la explotación laboral o son vendidos a parejas de extranjeros.
De acuerdo con las cifras de Unicef y del Centro de Búsquedas de Niños Desaparecidos, en México hay entre 100.000 y 130.000 menores cuyos paraderos sus familias desconocen.
La ex fiscal mexicana Alicia Elena Pérez Duarte, explicó que en México existen dos grandes servicios de prositución infantil; uno, el que se ofrece a empresarios y altos funcionarios en hoteles como "servicios ejecutivos" y que se enmascaran como un servicio de masajes o de acompañantes.
El segundo tipo de prostitución, se efectúa con el servicio a fiestas a políticos, legisladores, funcionarios y hasta jueces locales, donde los proveedores llevan niñas para que los hombres relajen sus tensiones.
Puso como ejemplo el caso de una fiesta donde participó el procurador del Estado de Jalisco Tomás Coronado en enero pasado, en donde hubo prácticas sexuales con menores.
(fuente: EFE, en El Litoral)
Este tipo de delitos es aberrante, y requiere de soluciones concretas y no de vanos discursos. Por lo general las redes de prostitución infantil actúan en la mayoría de los países latinoamericanos - incluso el mío y sus países limítrofes- tornando a esta situación aberrante muy gravosa.
De acuerdo con las cifras de Unicef y del Centro de Búsquedas de Niños Desaparecidos, en México hay entre 100.000 y 130.000 menores cuyos paraderos sus familias desconocen.
La ex fiscal mexicana Alicia Elena Pérez Duarte, explicó que en México existen dos grandes servicios de prositución infantil; uno, el que se ofrece a empresarios y altos funcionarios en hoteles como "servicios ejecutivos" y que se enmascaran como un servicio de masajes o de acompañantes.
El segundo tipo de prostitución, se efectúa con el servicio a fiestas a políticos, legisladores, funcionarios y hasta jueces locales, donde los proveedores llevan niñas para que los hombres relajen sus tensiones.
Puso como ejemplo el caso de una fiesta donde participó el procurador del Estado de Jalisco Tomás Coronado en enero pasado, en donde hubo prácticas sexuales con menores.
(fuente: EFE, en El Litoral)
Este tipo de delitos es aberrante, y requiere de soluciones concretas y no de vanos discursos. Por lo general las redes de prostitución infantil actúan en la mayoría de los países latinoamericanos - incluso el mío y sus países limítrofes- tornando a esta situación aberrante muy gravosa.