pastor
13-abr.-2011, 22:28
Ha comenzado un nuevo día
y mis ojos contemplan el amanecer,
la mañana es muy fría,
espero no ver el atardecer.
Las calles se llenan de gente,
me ven y se burlan de mi,
trato de ser indiferente
pues nunca entenderán porque me perdí.
A nadie le importa un vagabundo
ni que razón me trajo hasta aquí,
si alguien entrará en mi mundo
también desearía morir.
No tengo un propósito para vivir,
el destino me lo arrebato todo;
lo que más he amado dejó de existir
y la vida me condeno a estar solo.
A nadie he culpado mi tragedia,
en silencio he llorado mi desdicha,
solo lagrimas acompañaron mi existencia,
solo así pude soportar su partida.
Mi vida se convirtió en un abismo,
jamás pude apagar este dolor,
fue tanta la pasión que nos dimos
que el mundo fue poco para tanto amor.
Y se fue vaciando mi alma
y me fui perdiendo en la inconciencia,
ya no pude encontrar la calma
que mi corazón pedía con insistencia.
Nunca nadie supo entender
porque mis ojos dejaron de brillar,
nadie podría llegar a comprender
que noche y día sufría más y más.
Es por eso que no quiero vivir,
porque la amo con tanta fuerza,
porque ya no aguanto la tristeza
y sin ella es mejor morir.
Mis ojos contemplan el atardecer,
ha terminado este día,
la noche también será muy fría,
¡¡espero no ver el amanecer!!.
______________________ ...Pastor Solitario..._____________________
y mis ojos contemplan el amanecer,
la mañana es muy fría,
espero no ver el atardecer.
Las calles se llenan de gente,
me ven y se burlan de mi,
trato de ser indiferente
pues nunca entenderán porque me perdí.
A nadie le importa un vagabundo
ni que razón me trajo hasta aquí,
si alguien entrará en mi mundo
también desearía morir.
No tengo un propósito para vivir,
el destino me lo arrebato todo;
lo que más he amado dejó de existir
y la vida me condeno a estar solo.
A nadie he culpado mi tragedia,
en silencio he llorado mi desdicha,
solo lagrimas acompañaron mi existencia,
solo así pude soportar su partida.
Mi vida se convirtió en un abismo,
jamás pude apagar este dolor,
fue tanta la pasión que nos dimos
que el mundo fue poco para tanto amor.
Y se fue vaciando mi alma
y me fui perdiendo en la inconciencia,
ya no pude encontrar la calma
que mi corazón pedía con insistencia.
Nunca nadie supo entender
porque mis ojos dejaron de brillar,
nadie podría llegar a comprender
que noche y día sufría más y más.
Es por eso que no quiero vivir,
porque la amo con tanta fuerza,
porque ya no aguanto la tristeza
y sin ella es mejor morir.
Mis ojos contemplan el atardecer,
ha terminado este día,
la noche también será muy fría,
¡¡espero no ver el amanecer!!.
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