Guanako
21-mar.-2009, 22:46
*Copiado de otro lugar........
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Siendo veterinario, fui llamado a examinar un viejo pastor irlandes de diez años de edad, de nombre Belker. Los dueños del perro, Ron, su esposa Lisa y su pequeño hijo de nombre Shane, eran muy apegados a belker, y ellos tenían la esperanza de un milagro.
Examiné a Belker, y encontré que él estaba muriendo de cáncer. Le dije a la familia que no podriamos hacer nada por él, y les ofrecí practicar la eutanasia para el viejo perro en su propia casa.
Al hacer los arreglos, Lisa y Ron me comentaron que habían estado pensando en que tal vez sería bueno para Shane, el pequeño de seis años, que observara el procedimiento. Sentían que shane podría aprender algo de la experiencia.
Al día siguiente, sentía un nudo en mi garganta, mientras la familia de Belker lo rodeaba. Shane parecía estar en calma, acariciando a su viejo amigo por última vez, y me maravillaba que él entendiera lo que estaba a punto de suceder. Al cabo de unos minutos, Belker dormía en paz.
El pequeño niño parecía aceptar la transcisión de Belker sin dificultad ní confusion. Nos sentamos juntos por un rato despues de la muerte de Belker, hablando acerca de lo triste del hecho que la vida de los perros sea tan corta, comparada con la de los humanos. Shane, quién hasta entonces había permanecido escuchando en silencio, dijo... -“Yo sé porque”...– mientras todos volteamos a mirarlo.
Lo que dijo a continuación me dejó sin aliento, nunca había escuchado una explicación tan reconfortante. El dijo: -“La gente realmente no ha comenzado a vivir hasta que pueden aprender como vivir una buena vida, como amar a todos todo el tiempo, y como ser buenos y lindos siempre ... cierto?” - el chico continuó- “Bueno, los perros al nacer ya seben hacer todo eso, entonces ellos no necesitan estar aquí tanto como nosotros".
Recuerda, si un perro fuera un maestro, aprenderíamos cosas como:
-Vive de manera simple. Ama generosamente. Sé profundamente cuidadoso. Habla amablemente.
-Si alguien que amas llega, corre a su encuentro para saludarlo efusivamente.
-Nunca dejes pasar la oportunidad de un agradable paseo.
-Permitete disfrutar de la experiencia del aire fresco en tu cara por la ventana.
-Toma agradables siestas y estírate despues de despertar.
-Corre, juguetea y diviértete diariamente.
-Propina atenciones a los demás, y permite que la gente te haga caricias.
-Evita morder, cuando un simple gruñido basta.
-En los días ajetreados, descansa tu espalda en el césped.
-En los días calurosos bebe agua en grandes cantidades, y tirate a disfrutar bajo la fresca sombra de un árbol.
-Cuando estés contento, baila y mueve tu cuerpo entero.
-Complacete con la simple alegría de una larga caminata.
-Sé leal, y aprende a perdonar.
-Nunca pretendas ser algo que no eres.
-Si lo que tu quieres permanece enterrado, cava y empuja hasta encontrarlo.
-Cuando alguien esté pasando por un mal día, sé silencioso, sientate cerca de él, y restriégate cariñosamente.
Recuerda, disfruta cada momento de cada día, y aún de las cosas más sencillas.
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Siendo veterinario, fui llamado a examinar un viejo pastor irlandes de diez años de edad, de nombre Belker. Los dueños del perro, Ron, su esposa Lisa y su pequeño hijo de nombre Shane, eran muy apegados a belker, y ellos tenían la esperanza de un milagro.
Examiné a Belker, y encontré que él estaba muriendo de cáncer. Le dije a la familia que no podriamos hacer nada por él, y les ofrecí practicar la eutanasia para el viejo perro en su propia casa.
Al hacer los arreglos, Lisa y Ron me comentaron que habían estado pensando en que tal vez sería bueno para Shane, el pequeño de seis años, que observara el procedimiento. Sentían que shane podría aprender algo de la experiencia.
Al día siguiente, sentía un nudo en mi garganta, mientras la familia de Belker lo rodeaba. Shane parecía estar en calma, acariciando a su viejo amigo por última vez, y me maravillaba que él entendiera lo que estaba a punto de suceder. Al cabo de unos minutos, Belker dormía en paz.
El pequeño niño parecía aceptar la transcisión de Belker sin dificultad ní confusion. Nos sentamos juntos por un rato despues de la muerte de Belker, hablando acerca de lo triste del hecho que la vida de los perros sea tan corta, comparada con la de los humanos. Shane, quién hasta entonces había permanecido escuchando en silencio, dijo... -“Yo sé porque”...– mientras todos volteamos a mirarlo.
Lo que dijo a continuación me dejó sin aliento, nunca había escuchado una explicación tan reconfortante. El dijo: -“La gente realmente no ha comenzado a vivir hasta que pueden aprender como vivir una buena vida, como amar a todos todo el tiempo, y como ser buenos y lindos siempre ... cierto?” - el chico continuó- “Bueno, los perros al nacer ya seben hacer todo eso, entonces ellos no necesitan estar aquí tanto como nosotros".
Recuerda, si un perro fuera un maestro, aprenderíamos cosas como:
-Vive de manera simple. Ama generosamente. Sé profundamente cuidadoso. Habla amablemente.
-Si alguien que amas llega, corre a su encuentro para saludarlo efusivamente.
-Nunca dejes pasar la oportunidad de un agradable paseo.
-Permitete disfrutar de la experiencia del aire fresco en tu cara por la ventana.
-Toma agradables siestas y estírate despues de despertar.
-Corre, juguetea y diviértete diariamente.
-Propina atenciones a los demás, y permite que la gente te haga caricias.
-Evita morder, cuando un simple gruñido basta.
-En los días ajetreados, descansa tu espalda en el césped.
-En los días calurosos bebe agua en grandes cantidades, y tirate a disfrutar bajo la fresca sombra de un árbol.
-Cuando estés contento, baila y mueve tu cuerpo entero.
-Complacete con la simple alegría de una larga caminata.
-Sé leal, y aprende a perdonar.
-Nunca pretendas ser algo que no eres.
-Si lo que tu quieres permanece enterrado, cava y empuja hasta encontrarlo.
-Cuando alguien esté pasando por un mal día, sé silencioso, sientate cerca de él, y restriégate cariñosamente.
Recuerda, disfruta cada momento de cada día, y aún de las cosas más sencillas.