jesus super star
06-feb.-2009, 18:09
La leyenda del aguila
Bufalos sedientos volaban entre matojos y herbajos sobre las
cuestas. La polvareda como nube veloz atestigua la estampida de
los cuadrupedos cornudos, las siluetas de sombras de las rocosas
aliviaron la sed inclemente de los mas viejos, los espejos de
cristalinas lagunas se dejaron seducir en la majestuosa ladera ,
recompensa de las lides , se avecinaba en las miradas tambien
sedientas, los estruendos de fusiles no perturbaron el espectaculo
de la manada en avalancha, muchos galoparon hasta las riberas
del preciado elixir de vidas, otros continuaron en sus galopes en
esa magica vertiente del umbral de vida y muerte.
En las alturas el vuelo majestuoso del aguila real, simulaba esas
poses aladas del cazador certero, los traficantes de pieles en sus
arduas faenas lo miraban de soslayo, tal vez aquella alada
criatura en paciencia altanera esperaba por su momento de festin.
Las miradas escrutaron los cielos y hasta los restos despellejados
de los desafortunados uros de sabanas. Aquellos aposentos donde
las bestias y sus cazadores vieron los ultimos destellos de sol,
aquella mistica leyenda de un furtivo miron que desde los
cielos esgrimio el alarido de ataque y que posado en el brazo
fuerte del jefe nativo, se hizo leyenda de mitos en las otroras
sabanas del norte.
Autor.
JESUS SUPER STAR
Del libro meditaciones pemicas de jesus super star
Bufalos sedientos volaban entre matojos y herbajos sobre las
cuestas. La polvareda como nube veloz atestigua la estampida de
los cuadrupedos cornudos, las siluetas de sombras de las rocosas
aliviaron la sed inclemente de los mas viejos, los espejos de
cristalinas lagunas se dejaron seducir en la majestuosa ladera ,
recompensa de las lides , se avecinaba en las miradas tambien
sedientas, los estruendos de fusiles no perturbaron el espectaculo
de la manada en avalancha, muchos galoparon hasta las riberas
del preciado elixir de vidas, otros continuaron en sus galopes en
esa magica vertiente del umbral de vida y muerte.
En las alturas el vuelo majestuoso del aguila real, simulaba esas
poses aladas del cazador certero, los traficantes de pieles en sus
arduas faenas lo miraban de soslayo, tal vez aquella alada
criatura en paciencia altanera esperaba por su momento de festin.
Las miradas escrutaron los cielos y hasta los restos despellejados
de los desafortunados uros de sabanas. Aquellos aposentos donde
las bestias y sus cazadores vieron los ultimos destellos de sol,
aquella mistica leyenda de un furtivo miron que desde los
cielos esgrimio el alarido de ataque y que posado en el brazo
fuerte del jefe nativo, se hizo leyenda de mitos en las otroras
sabanas del norte.
Autor.
JESUS SUPER STAR
Del libro meditaciones pemicas de jesus super star