marcos_mza
31-ago.-2008, 14:02
Hola mi nombre es marcos y soy nuevo en este foro... chicos hace casi aproximadamente 1 año a unos familiares mios le vendiero una casa q tenia una instalacion d gas mal echa....murieron y esta fue la notica q se publico en el diario los andes d mza..gracias por leer
"Hace un año que mi hija y su familia murieron y no tengo respuestas"
Carmen Álvarez de Dávila quiere que termine la investigación por la muerte de sus seres queridos. Fallecieron por inhalar monóxido de carbono el primer día que ocuparon un departamento alquilado.
Oscar Guillén - [email protected]
"Yo tengo un vacío enorme. Me falta la mitad de mi vida. Ya va a hacer un año que murió mi hija, su esposo y mis dos nietos y no tengo respuestas de la Justicia", dice Carmen Álvarez de Dávila (62), al rememorar la muerte de sus seres queridos.
Marcelo Almonacid, un empleado de la Casa de Gobierno de 40 años; su esposa Laura Andrea Dávila, de 38, y los hijos de ambos: Erica Sabrina, de 13, y Enzo Germán, de 5, murieron el 19 de setiembre pasado por una pérdida de monóxido de carbono que se produjo en el departamento que habían alquilado y que ese mismo día ocuparon por primera (y última) vez.
"Los expedientes van de acá para allá. La Justicia es lenta, muy lenta. Esto no nos deja vivir. Mi marido tiene depresión. Mataron a mi única hija mujer y a mis dos primeros nietos", dice Carmen, al borde del llanto.
Según cuenta la mujer, el día en que murieron sus familiares intoxicados, ella fue al departamento ubicado en Pedro Goyena al 1664 de Godoy Cruz, del barrio Empleados de Comercio, y nadie le abrió.
"El 19 se terminaron de mudar. Al otro día, mi hija iba a llevar al nene a un paseo del jardincito y yo iba a llevar a la nena a la fiesta del Día de la Primavera. Toqué el timbre y nadie me abrió. Ahí llamé a la Policía", recuerda la mujer.
Denuncias de los vecinos
Según se publicó en diario Los Andes dos días después de lo que, en principio, parecía un accidente doméstico, en el departamento había algunos problemas con la instalación de gas.
En efecto, así lo denunciaron ex vecinos que se vieron obligados a rescindir el contrato de locación por el mal estado del inmueble.
Incluso los ex inquilinos le mandaron cartas documento a la propietaria, Marta Torre, para que solucionara los problemas.
"Después nos dimos cuenta que había unas denuncias por pérdidas de gas. Había pérdidas por todos lados. Se trataba de una conexión clandestina", apunta Carmen.
También los vecinos de arriba del fatídico departamento habrían sufrido una intoxicación leve por los gases que venían de abajo.
"¿Cómo no voy a pedir justicia con esta situación? La dueña del departamento y la inmobiliaria Ahumada sabían cómo estaba el departamento por las denuncias. No tendrían que haberlo alquilado", sostuvo Carmen.
La mujer dice que el próximo 17 de setiembre -a pocos días que se cumpla un año de la muerte de la familia Almonacid- se unirá a una marcha que organiza la Asociación Víctimas del Delito para pedir que su llamativo caso tenga pronta resolución.
Por ahora, el expediente está en la Fiscalía de Godoy Cruz, que deberá terminar la investigación para saber si los dueños de la vivienda tienen algún tipo de responsabilidad y luego elevar el caso a juicio si fuera necesario.
opinen... gracias...
"Hace un año que mi hija y su familia murieron y no tengo respuestas"
Carmen Álvarez de Dávila quiere que termine la investigación por la muerte de sus seres queridos. Fallecieron por inhalar monóxido de carbono el primer día que ocuparon un departamento alquilado.
Oscar Guillén - [email protected]
"Yo tengo un vacío enorme. Me falta la mitad de mi vida. Ya va a hacer un año que murió mi hija, su esposo y mis dos nietos y no tengo respuestas de la Justicia", dice Carmen Álvarez de Dávila (62), al rememorar la muerte de sus seres queridos.
Marcelo Almonacid, un empleado de la Casa de Gobierno de 40 años; su esposa Laura Andrea Dávila, de 38, y los hijos de ambos: Erica Sabrina, de 13, y Enzo Germán, de 5, murieron el 19 de setiembre pasado por una pérdida de monóxido de carbono que se produjo en el departamento que habían alquilado y que ese mismo día ocuparon por primera (y última) vez.
"Los expedientes van de acá para allá. La Justicia es lenta, muy lenta. Esto no nos deja vivir. Mi marido tiene depresión. Mataron a mi única hija mujer y a mis dos primeros nietos", dice Carmen, al borde del llanto.
Según cuenta la mujer, el día en que murieron sus familiares intoxicados, ella fue al departamento ubicado en Pedro Goyena al 1664 de Godoy Cruz, del barrio Empleados de Comercio, y nadie le abrió.
"El 19 se terminaron de mudar. Al otro día, mi hija iba a llevar al nene a un paseo del jardincito y yo iba a llevar a la nena a la fiesta del Día de la Primavera. Toqué el timbre y nadie me abrió. Ahí llamé a la Policía", recuerda la mujer.
Denuncias de los vecinos
Según se publicó en diario Los Andes dos días después de lo que, en principio, parecía un accidente doméstico, en el departamento había algunos problemas con la instalación de gas.
En efecto, así lo denunciaron ex vecinos que se vieron obligados a rescindir el contrato de locación por el mal estado del inmueble.
Incluso los ex inquilinos le mandaron cartas documento a la propietaria, Marta Torre, para que solucionara los problemas.
"Después nos dimos cuenta que había unas denuncias por pérdidas de gas. Había pérdidas por todos lados. Se trataba de una conexión clandestina", apunta Carmen.
También los vecinos de arriba del fatídico departamento habrían sufrido una intoxicación leve por los gases que venían de abajo.
"¿Cómo no voy a pedir justicia con esta situación? La dueña del departamento y la inmobiliaria Ahumada sabían cómo estaba el departamento por las denuncias. No tendrían que haberlo alquilado", sostuvo Carmen.
La mujer dice que el próximo 17 de setiembre -a pocos días que se cumpla un año de la muerte de la familia Almonacid- se unirá a una marcha que organiza la Asociación Víctimas del Delito para pedir que su llamativo caso tenga pronta resolución.
Por ahora, el expediente está en la Fiscalía de Godoy Cruz, que deberá terminar la investigación para saber si los dueños de la vivienda tienen algún tipo de responsabilidad y luego elevar el caso a juicio si fuera necesario.
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