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Tema: "Hagan lo que ÉL les diga"

  1. #1
    Fecha de Ingreso
    14-octubre-2014
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    Predeterminado "Hagan lo que ÉL les diga"

    ¡Hagan lo que Él les diga!

    El discípulo de Cristo toma la Cruz y sigue por el Camino que le ha marcado su Maestro sin poner condiciones. El discípulo y servidor escucha a María, modelo de discípula y servidora.*

    En Caná, María se dirige a los servidores y les deja un mensaje definitivo: “Hagan lo que Él les diga”. María sabe que su Hijo tiene la palabra, que Él es la Palabra eterna del Padre... Ella tiene la experiencia de “hacer” lo que Dios quiere, cumplir la voluntad del Padre y ser fiel a su Palabra: “Hágase en mí según tu Palabra”. María está siempre atenta a la voz del Espíritu, es la Mujer receptora de la Palabra , la Discípula y Servidora dispuesta a ponerla en práctica.

    María siempre nos remite a Jesús para que “nuestra agua” se convierta en vino. Esta palabra de María – hagan lo que él les diga–, viene a ser su testamento. Podemos considerar esta expresión como la séptima intervención de María en el evangelio, es la última vez que habla... y no necesita decirnos ya más.*

    María nos orienta en la aventura de la fe como discípulos y servidores del Señor, pues su palabra nos remite a Jesús: “Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando” (Jn 15, 14). La escucha de la Palabra está en relación con la obediencia, y la realización de la misma. La fe en Cristo supone el cumplimiento de sus mandatos. Hay una secuencia lógica entre los verbos oír, obedecer y cumplir. *Son verbos que indican disponibilidad, acción y efectividad para cumplir los planes de Dios. La fe religiosa implica unirse al querer de Dios, docilidad obsecuente y amorosa de la razón y de la voluntad –en libertad personal– para acoger los designios divinos. La fe cristiana siempre es activa.

    El mismo Dios Creador, se muestra efectivo desde el principio. Dice: “Hágase la luz”. Y la luz se hizo. Jesucristo, el Verbo encarnado, dirá al entrar en este mundo: “He aquí, oh Dios, que vengo para hacer tu voluntad”. Lo mismo dirá en el Huerto de los Olivos ante su pasión inminente: “Padre, que no se haga lo que yo quiero sino lo que tú quieres”. Jesús nos enseñó a orar al Padre diciendo: “Hágase tu voluntad”. Esa misma actitud tuvo María cuando respondió al ángel: “Hágase en mí según tu Palabra”. Jesús proclamará bienaventurado al creyente activo: “Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la ponen en práctica”.
    En Caná, María es reconocida como “la madre de Jesús” y como “la mujer”. Son nombres que denotan su identidad y su función como Madre de Cristo y de la Iglesia. María anticipa “la hora” de Jesús que se consumará en el Calvario; ella nos remite al mandato y al testamento de Jesús. María nos recomienda “hacer lo que él nos diga”. Y Jesús nos dirá: “Ámense como yo les he amado”, “hagan esto en memoria mía”, “vayan por todo el mundo predicando el evangelio y bautizando”, etc.

    María en las bodas de Caná también fue testigo de la gloria del Hijo que realizó su primer signo, y con los discípulos acrecentó su fe en los nuevos tiempos mesiánicos. El “esposo divino” de la boda mesiánica comenzaba a revelarse y se establecía una nueva alianza que se consumaría “al tercer día” de su pascua, cuando los discípulos comprendieron, por fin, que Él estaba en el Padre (cf. Jn 14,20). María, los parientes, Jesús y los discípulos aparecen unidos en comunidad mesiánica que regresa a Cafarnaún –después de haber visto la gloria del Señor–, como germen de la Iglesia.

    Jesús en Caná, aunque no había llegado su hora, intervino ante los ruegos de María y manifestó su gloria para que los discípulos creyeran en Él. Y cuando llegó su hora, al pie de la Cruz , nos la entregó como Madre.*
    Que nosotros recibamos a María en nuestra casa y en nuestro corazón, que acojamos sus palabras amables y sabias para ser fieles discípulos de Cristo... y contemplar su gloria.

  2. #2
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    14-octubre-2014
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    Predeterminado

    María: Así se llama (Lc 1:27).
    Madre: Es madre de Jesús (Is 7:14; Lc 1:26-38) y de los creyentes (Jn 19:25-27).
    Virgen: La encarnación del Verbo es virginal (Is 7:14; Lc 1:26-38).
    Reina: Es la madre del Rey de reyes, la gebirah (Jer 13:18; Lc 1:32-33); nótese la diferencia entre la esposa del Rey (I Reg 1:15-21) y la madre del Rey (I Reg 2:12-20).¿Quién es más grande, Jesús o Salomón? (Mt 12:42; Lc 11:31); vea el retrato de la Reina en (Ap 12).
    Santa: Es la llena de gracia (gr. Kejaritómene) (Lc 1:28) bendita entre las mujeres (Lc 1:28; Lc 1:42).

    Santa María Lc 1:28.42
    Santa Madre de Dios Jn 1:1; Is 7:14; Lc 1:26-38 Jesús es Dios (Jn 1:1).
    Madre de Jesucristo Lc 1:26-38 María es madre de Jesucristo.
    Madre de la Divina Gracia Lc 1:26-38 Jesús es la Divina Gracia.
    Madre Purísima Lc 1:28 Es la llena de gracia (gr. Kejaritómene).
    Madre virginal Is 7:14; Lc 1:26-38
    Madre sin mancha Lc 1:28 Es la llena de gracia (gr. Kejaritómene).
    Madre inmaculada Lc 1:28 Es la llena de gracia (gr. Kejaritómene).
    Madre amable Lc 1:39-56; Jn 2:1-11 Cuidó de su prima Isabel y fue atenta el las bodas de Caná.
    Madre del buen consejo Jn 2:5 Hagan lo que Él les diga.
    Madre del Creador Jn 1:1.3; Is 7:14; Lc 1:26-38 Jesús es el Creador (Jn 1:3) por ser Dios (Jn 1:1).
    Madre del Salvador Lc 1:26-38 Jesucristo es el Salvador del mundo.
    Virgen prudentísima Lc 2:19.51 Guardaba estas cosas en su corazón.
    Virgen digna de veneración Lc 1:28.42.48 Llena de gracia (Lc 1:28), bendita entre las mujeres (Lc 1:28.42), bienaventurada (Lc 1:48).
    Virgen digna de alabanza Lc 1:28.42.48 Llena de gracia (Lc 1:28) bendita entre las mujeres (Lc 1:28.42), bienaventurada (Lc 1:48).
    Causa de nuestra alegría Lc 1:26-38 Jesucristo es nuestra alegría
    Reina de los Ángeles Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de los Patriarcas Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de los Profetas Jer 13:18; Lc 1n:32-33; Ap 12:1 Ver
    Reina de los Apóstoles Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de los Mártires Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de los Confesores Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de las Vírgenes Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de todos los Santos Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina del Santísimo Rosario Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1 A Cristo A través de Ella está dedicada esta oración.
    Reina de la familia Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1
    Reina de la Paz Jer 13:18; Lc 1:32-33; Ap 12:1

    Llena de gracia:
    Esta es la parte donde más necesito la imaginación del lector. Vamos a observar, a meditar lo que quiere decir "Llena de Gracia".

    Lo primero que pensamos es que Dios le concedió a María abundantes dones y gracias espirituales, virtudes, etc.
    ¿Por qué? Por Quién iba a ser el Huésped. Se trata ni más (porque no se puede) ni menos que el Verbo encarnado, el Logos eterno del Padre.
    Por tanto, María es adornada de todas las gracias y dones espirituales en función de Jesús.

    Esto requiere masticarlo despacio, veamos:

    El vocablo griego Kejaritomene (Κεχαριτομενη) es mucho má profundo de lo que imaginamos a primera vista, significa la plenitud de la gracia lo cual es bastante fuerte; es el único lugar de la Escritura donde se utiliza este vocablo; más aún, en toda la literatura griega antigua aparece unas doce veces (Ponce Cuéllar, Miguel; María p.100 -nota al pie: 2- ver Bibliografía hasta arriba).

    Haciendo una extensión a la palabra gracia podemos decir que la mayor gracia recibida por María no es la plenitud de la gracia sino Aquel que es Fuente de la gracia.

    Jesús es la plenitud de la Gracia, y María tiene a Jesús en plenitud. Necesitamos un poco de imaginación para ver esto, María lleva a Jesús por dentro, imagniemos la escena, en la que la doncella de Nazaret está encinta, imaginémosla con seis meses de embarazo, que ya se nota a simple vista; ahora meditemos Quién está en su vientre... ¿No es la mayor de las gracias llevar a Jesús dentro?

    Con esta imagen en la mente, podremos comprender muchos de los títulos que la Iglesia le atribuye a María, los cuales giran en torno a estos dos: Arca de la Alianza y Madre de Dios.

    Arca de la Alianza:
    Este término es de uso muy antiguo y de significación muy profunda. Lo utiliza Lucas en su relato de la visitación de María a su prima Isabel, y lo utiliza Juan en el Apocalipsis.

    Antes de detenernos en la antigüedad y uso de esta expresión vamos a usar la imaginación nuevamente.

    ¿Qué era el Arca para los Israelitas? El Arca era una "caja" mandada hacer por Dios (Ex 25,10-22) con el propósito de comunicarle a Israel sus oráculos desde el Arca (Ex 25,22).

    El Arca contenía lo más valioso para los judíos; las tablas de la ley (Ex 40,18-21), la vara de Aarón (Núm 17,16-26) y el maná que con que Dios los alimentó en el desierto (Ex 16,32-34). En resumen, el Arca era el signo de la presencia de Dios.

    Ahora bien, María lleva en el vientre algo mucho más valioso que todo esto. María lleva en su seno al Autor de la Ley, lleva en sus entrañas al que colgó de un madero para salvar al mundo; y de su ser tomo carne el Pan Vivo bajado del Cielo que da la Vida Eterna.

    Por esto María es el Tabernáculo donde habita el Señor, y de aquí surgen varias letanías, vivas expresiones del pueblo cristiano a lo largo de los siglos y que son propuestas por la Iglesia para instrucción nuestra:

    Arca de la Alianza.
    Casa de oro (adornada con gracias espirituales que son simbolizadas por el oro como el Arca-símbolo era de oro físico).
    Vaso espiritual (que contiene al Verbo).
    Vaso digno de honor (por el contenido).
    Vaso insigne de devoción.
    Puerta del Cielo (que se abre para que venga Cristo).
    Salud de los enfermos (por traer a Cristo, nuestra salud).
    Consuelo de los aflijidos (por traer a Cristo, nuestro consuelo).
    Refugio de los pecadores (quien se refugia en María, encuentra a Cristo, y está protegido del maligno).
    Auxilio de los cristianos (¡qué mejor ayuda para un cristiano que traerle y recordarle la presencia del Redentor!).
    María es todo esto por ser la portadora de Dios por ser el Arca de la Nueva Alianza...

    Merece mayor reverencia y mayor fiesta que la recibida por el Arca antigua en Sam (2 Sam 6, 1-ss) donde vemos a David y a todo Israel en canto, danza y procesión delante del Arca-símbolo.

    Así es la manifestación del cariño que el pueblo cristiano le tributa a esta Arca-mujer que es la verdadera...
    "la que contiene al que los cielos no pueden contener".

    Una muestra de que esto es una creencia firme de la antiguedad cristiana, contemporánea al establecimiento del canon de las Escrituras, es esta cita: "O, Virgen María, tú eres el Arca, el cofre de oro que contiene la verdadera maná, es decir, la carne en que reside la divinidad" (San Atanasio de Alejandría 295-373).

    Madre de Dios:
    Dado que Cristo es Dios (Jn 1,1) y María es madre de Cristo, María es madre de Dios, la discusión de este tema exede a este artículo.
    María es Virgen (cf.Is 7:14; Mt 1:18.20-23; Lc 1:26) y es Madre (cf. Is 7:14; Mt 1:18.20-23; Lc 1:26-38) del Rey (cf. Jn 18:37), de Dios (cf. Jn 1:1) que ordenó honrar y obedecer a los padres (cf. Ex 20:12; Lev 20:9; Dt 4:16) ¿De qué manera va a cumplir el mandamiento Aquel que lo instituyó?

    La respuesta está prefigurada en el A.T.; pues Jesús es el Hijo de David, en Salomón y su madre, cuyo poder está basado en los lazos maternos... no en la autoridad ni en el poder mismo... sino en el amor.

    La figura se vuelve realidad en el N.T.; en las bodas de caná símbolo del culmen de la Nueva Creación en Cristo...Ya no tienen vino... "Mujer, eso a nosotros ¿qué?"... Hagan lo que Él les diga... Y se obró el milagro (cf. Jn 2:1-12). El resultado fueron Las Bodas del Cordero.

    La realidad crece en el momento en que Jesús en el suplicio de la Cruz (cf. Jn 19,25-27) le asigna un papel especial. Mujer, he ahí a tu hijo... Juan, he ahí a tu madre... El discípulo amado es el que escucha a Jesús (cf. Jn xx,yy); por tanto el regalo de María fue a todos los creyentes, como si dijera: Ya me pariste y me cuidaste a mí, ahora pare virginalmente y cuida de mi cuerpo místico que es la Iglesia.

    Desde ese momento, María se vuelve referencia obligada para conocer afondo al Maestro, como lo hiciera Lucas; y cuidó maternalmente de su Cuerpo Místico, cuando estaba por nacer, en el cenáculo, en la espera del Paráclito (cf. Hch 1:14).

    Finalmente, la recompensó y la coronó y se la llevó, porque ¿Cómo está Dios sin su Arca? El que mandó honrar a los padres, El que lavó los pies a sus discípulos, el que nos dejó un mandamiento Nuevo: Ámense los unos a los otros... El que decidió que la caridad nunca pasará (cf. 1 Cor 13:8) ¿qué hizo con su madre?
    Se la llevó a la Gloria y la coronó para que reine como Betsabe con Salomón (cf. Ap 11:19-12:1) pero de un modo más perfecto en el Reino de su Padre.

    Reina elevada al Cielo:
    María es el Arca-mujer de la nueva alianza, el Arca está en el cielo como una gran señal (cf. Ap 11:19-12:1).

  3. #3
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    Predeterminado

    Este tema apesta!!!

  4. #4
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    Predeterminado

    "AKATHISTOS"
    HIMNO EN HONOR A LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
    SIGLO VII O VIII
    Cuando el enemigo oye el akathistos huye furioso


    ¡A la invicta estratega el himno de victoria! Liberada de cruel desventura, este canto de gracias a ti te dedico, yo, tu ciudad, ¡Oh Madre de Dios!
    Tú, que gozas de un poder invencible, líbrame de toda clase de peligros,
    para que te aclame: ¡Ave, Esposa Inmaculada!

    Salve, por ti resplandece la dicha; Salve, por ti se eclipsa la pena. Salve, levantas a Adán, el caído; Salve, rescatas el llanto de Eva.
    Salve, oh cima encumbrada a la mente del hombre; Salve, abismo insondable a los ojos del ángel. Salve, tú eres de veras el trono del Rey; Salve, tú llevas en ti al que todo sostiene.
    Salve, lucero que el Sol nos anuncia; Salve, regazo del Dios que se encarna. Salve, por ti la creación se renueva; Salve, por ti el Creador nace niño.
    Salve, ¡Virgen Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!

    Salve, tú guía al eterno consejo; Salve, tú prenda de arcano misterio. Salve, milagro primero de Cristo; Salve, compendio de todos los dogmas.
    Salve, celeste escalera que Dios ha bajado; Salve, oh puente que llevas los hombres al cielo. Salve, de angélicos coros solemne portento; Salve, de turba infernal lastimero flagelo.
    Salve, inefable, la Luz alumbraste;
    Salve, a ninguno dijiste el secreto. Salve, del docto rebasas la ciencia; Salve, del fiel iluminas la mente.
    Salve, ¡Virgen y Esposa! Salve, ¡Esposa Inmaculada!.

    Salve, oh tallo del verde Retoño;
    Salve, oh rama del Fruto incorrupto. Salve, al pío Arador tú cultivas;
    Salve, tú plantas quien planta la vida. Salve, oh campo fecundo - de gracias copiosas; Salve, oh mesa repleta - de dones divinos. Salve, un Prado germinas - de toda delicia; Salve, al alma preparas - Asilo seguro. Salve, incienso de grata plegaria;
    Salve, ofrenda que el mundo concilia. Salve, clemencia de Dios para el hombre; Salve, del hombre con Dios confianza. Salve, ¡Virgen y Esposa!.

    Salve, Nutriz del Pastor y Cordero;
    Salve, aprisco de fieles rebaños.
    Salve, barrera a las fieras hostiles;
    Salve, ingreso que da al Paraíso.
    Salve, por ti con la tierra - exultan los cielos; Salve, por ti con los cielos - se alegra la tierra. Salve, de Apóstoles boca - que nunca enmudece; Salve, de Mártires fuerza - que nadie somete. Salve, de fe inconcuso cimiento;
    Salve, fulgente estandarte de gracia. Salve, por ti es despojado el averno; Salve, por ti revestimos la gloria.
    Salve, ¡Virgen y Esposa!

    Salve, oh Madre del Sol sin ocaso;
    Salve, aurora del místico Día.
    Salve, tú apagas hogueras de errores; Salve, Dios Trino al creyente revelas.
    Salve, derribas del trono - al tirano enemigo; Salve, nos muestras a Cristo - el Señor y el Amigo. Salve, nos has liberado - de bárbaros ritos; Salve, nos has redimido - de acciones de barro. Salve, destruyes el culto del fuego;
    Salve, extingues las llamas del vicio.
    Salve, camino a la santa templanza;
    Salve, alegría de todas las gentes.
    Salve, ¡Virgen y Esposa!

    Salve, levantas al género humano;
    Salve, humillas a todo el infierno.
    Salve, conculcas engaños y errores;
    Salve, impugnas del ídolo el fraude.
    Salve, oh mar que sumerge - al cruel enemigo; Salve, oh roca que das de beber - a sedientos de Vida. Salve, columna de fuego - que guía en tinieblas; Salve, amplísima nube - que cubres el mundo. Salve, nos diste el Maná verdadero;
    Salve, nos sirves Manjar de delicias.
    Salve, oh tierra por Dios prometida;
    Salve, en ti fluyen la miel y la leche. Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve ¡Esposa Inmaculada!

  5. #5
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    Predeterminado

    Parte II

    Salve, azucena de intacta belleza;
    Salve, corona de noble firmeza.
    Salve, la suerte futura revelas;
    Salve, la angélica vida desvelas.
    Salve, frutal exquisito - que nutre a los fieles; Salve, ramaje frondoso - que a todos cobija. Salve, llevaste en el seno - quien guía al errante; Salve, al mundo entregaste - quien libra al esclavo. Salve, plegaria ante el Juez verdadero; Salve, perdón del que tuerce el sendero. Salve, atavío que cubre al desnudo;
    Salve, del hombre supremo deseo.
    Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!

    Salve, mansión que contiene el Inmenso; Salve, dintel del augusto Misterio.
    Salve, de incrédulo equívoco anuncio; Salve, del fiel inequívoco orgullo.
    Salve, carroza del Santo - que portan querubes; Salve, sitial del que adoran - sin fin serafines. Salve, tú sólo has unido - dos cosas opuestas: Salve, tú sola a la vez - eres Virgen y Madre. Salve, por ti fue borrada la culpa;
    Salve, por ti Dios abrió el Paraíso.
    Salve, tú llave del Reino de Cristo;
    Salve, esperanza de bienes eternos. Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!

    Salve, sagrario de arcana Sapiencia; Salve, despensa de la Providencia. Salve, por ti se confunden los sabios; Salve, por ti el orador enmudece.
    Salve, por ti se aturden - sutiles doctores; Salve, por ti desfallecen - autores de mitos; Salve, disuelves enredos - de agudos sofistas; Salve, rellenas las redes - de los Pescadores. Salve, levantas de honda ignorancia; Salve, nos llenas de ciencia superna. Salve, navío del que ama salvarse; Salve, oh puerto en el mar de la vida. Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!.

    Salve, columna de sacra pureza;
    Salve, umbral de la vida perfecta.
    Salve, tú inicias la nueva progenie;
    Salve, dispensas bondades divinas.
    Salve, de nuevo engendraste - al nacido en deshonra; Salve, talento infundiste - al hombre insensato. Salve, anulaste a Satán - seductor de las almas; Salve, nos diste al Señor - sembrador de los castos. Salve, regazo de nupcias divinas;
    Salve, unión de los fieles con Cristo.
    Salve, de vírgenes Madre y Maestra;
    Salve, al Esposo conduces las almas.
    Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!.

    Salve, oh rayo del Sol verdadero;
    Salve, destello de Luz sin ocaso.
    Salve, fulgor que iluminas las mentes;
    Salve, cual trueno enemigos aterras.
    Salve, surgieron de ti - luminosos misterios; Salve, brotaron en ti - caudalosos arroyos. Salve, figura eres tú - de salubre piscina; Salve, tú limpias las manchas - de nuestros pecados. Salve, oh fuente que lavas las almas;
    Salve, oh copa que vierte alegría.
    Salve, fragancia de ungüento de Cristo;
    Salve, oh Vida del sacro Banquete.
    Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!.

    Salve, oh tienda del Verbo divino; Salve, más grande que el gran Santuario. Salve, oh Arca que Espíritu dora; Salve, tesoro inexhausto de vida. Salve, diadema preciosa - de reyes devotos; Salve, orgullo glorioso - de sacros ministros. Salve, firmísimo alcázar - de toda la Iglesia; Salve, muralla invencible - de todo el Imperio. Salve, por ti enarbolamos trofeos; Salve, por ti sucumbió el adversario. Salve, remedio eficaz de mi carne; Salve, inmortal salvación de mi alma. Salve, ¡Virgen y Esposa!
    Salve, ¡Esposa Inmaculada!.

  6. #6
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    Pura basura idolátrica!!!

  7. #7
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    Predeterminado

    Cita Iniciado por maxicastag Ver Mensaje
    Pura basura idolátrica!!!
    Si no te gusta, puedes irte. Pero así como se respeta tus escritos, respeta lo que otros hacen en sus propios temas. Tienes tu tema, eres libre de hacer lo quieras ahí.

  8. #8
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    Predeterminado

    MARIA EN LAS BODAS DE CANÁ
    Audiencia General
    S.S. Juan Pablo II
    26 de febrero de 1997
    *

    1. En el episodio de las bodas de Caná, san Juan presenta la primera intervención de María en la vida pública de Jesús y pone de relieve su cooperación en la misión de su Hijo.

    Ya desde el inicio del relato, el evangelista anota que "estaba allí la madre de Jesús" (Jn 2, 1) y, como para sugerir que esa presencia estaba en el origen de la invitación dirigida por los esposos al mismo Jesús y a sus discípulos (cf. Redemptoris Mater, 21), añade: "Fue invitado a la boda también Jesús con sus discípulos" (Jn 2, 2). Con esas palabras, san Juan parece indicar que en Caná, como en el acontecimiento fundamental de la Encarnación, María es quien introduce al Salvador.

    El significado y el papel que asume la presencia de la Virgen se manifiesta cuando llega a faltar el vino. Ella, como experta y solícita ama de casa, inmediatamente se da cuenta e interviene para que no decaiga la alegría de todos y, en primer lugar, para ayudar a los esposos en su dificultad.

    Dirigiéndose a Jesús con las palabras: "No tienen vino" (Jn 2, 3), María le expresa su preocupación por esa situación, esperando una intervención que la resuelva. Más precisamente, según algunos exégetas, la Madre espera un signo extraordinario, dado que Jesús no disponía de vino.

    2. La opción de María, que habría podido tal vez conseguir en otra parte el vino necesario, manifiesta la valentía de su fe porque, hasta ese momento, Jesús no había realizado ningún milagro, ni en Nazaret ni en la vida pública.

    En Caná, la Virgen muestra una vez más su total disponibilidad a Dios. Ella que, en la Anunciación, creyendo en Jesús antes de verlo, había contribuido al prodigio de la concepción virginal, aquí, confiando en el poder de Jesús aún sin revelar, provoca su "primer signo", la prodigiosa transformación del agua en vino.

    De ese modo, María procede en la fe a los discípulos que, cómo refiere San Juan, creerán después del milagro: Jesús " manifestó su gloria, y creyeron en él sus discípulos" (Jn 2, 11). Más aún, al obtener el signo prodigioso, María brinda un apoyo a su fe.

    3. La respuesta de Jesús a las palabras de María: "Mujer, ¿qué nos va a mí y a ti? Todavía no ha llegado mi hora" (Jn 2, 4), expresa un rechazo aparente, como para probar la fe de su madre.

    Según una interpretación, Jesús, desde el inicio de su misión, parece poner* en tela de juicio su relación natural de hijo, ante la intervención de su madre. En efecto, en la lengua hablada del ambiente, esa frase da a entender una distancia entre las personas, excluyendo la comunión de vida. Esta lejanía no elimina el respeto y la estima; el término "mujer", con el que Jesús se dirige a su madre, se usa en una acepción que reaparecerá en los diálogos con la cananea (cf. Mt 15, 28), la samaritana (cf. Jn 4, 21), la adúltera (cf. Jn 8, 10) y María Magdalena (cf. Jn 20, 13), en contextos que manifiestan una relación positiva de Jesús con sus interlocutoras.

    Con la expresión: "Mujer, ¿qué nos va a mi y a ti?", Jesús desea poner la cooperación de María en el plano de la salvación que, comprometiendo su fe y su esperanza, exige la superación de su papel natural de madre.

    4. Mucho más fuerte es la motivación formulada por Jesús: "Todavía no ha llegado mi hora" (Jn. 2, 4).

    Algunos estudiosos del texto sagrado, siguiendo la interpretación de San Agustín, identifican esa "hora" con el acontecimiento de la Pasión. Para otros, en cambio, se refiere al primer milagro en que se revelaría el poder mesiánico del profeta de Nazaret. Hay otros, por último, que consideran que la frase es interrogativa y prolonga la pregunta anterior: "¿Qué nos va a mí y a ti? ¿no ha llegado ya mi hora?" (Jn 2, 4). Jesús da a entender a María que él ya no depende de ella, sino que debe tomar la iniciativa para realizar la obra del Padre. María, entonces, dócilmente deja de insistir ante él y, en cambio, se dirige a los sirvientes para invitarlos a cumplir sus órdenes.

    En cualquier caso, su confianza en el Hijo es premiada. Jesús, al que ella ha dejado totalmente la iniciativa, hace el milagro, reconociendo la valentía y la docilidad de su madre: "Jesús les dice: "Llenad las tinajas de agua". Y las llenaron hasta el borde" (Jn 2, 7). Así, también la obediencia de los sirvientes contribuye a proporcionar vino en abundancia.

    La exhortación de María: "Haced lo que él os diga", conserva un valor siempre actual para los cristianos de todos los tiempos, y está destinada a renovar su efecto maravilloso en la vida de cada uno. Invita a una confianza sin vacilaciones, sobre todo cuando no se entienden el sentido y la utilidad de lo que Cristo pide.*

    De la misma manera que en el relato de la cananea (cf. Mt 15, 24-26) el rechazo aparente de Jesús exalta la fe de la mujer, también las palabras del Hijo "Todavía no ha llegado mi hora", junto con la realización del primer milagro, manifiestan la grandeza de la fe de la Madre y la fuerza de su oración.

    El episodio de las bodas de Caná nos estimula a ser valientes en la fe y a experimentar en nuestra vida la verdad de las palabras del Evangelio: "Pedid y se os dará" (Mt 7, 7; Lc 11, 9).

  9. #9
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    Cita Iniciado por VANGELIS Ver Mensaje
    Si no te gusta, puedes irte. Pero así como se respeta tus escritos, respeta lo que otros hacen en sus propios temas. Tienes tu tema, eres libre de hacer lo quieras ahí.

    Es que este foro es público. LLeno de ideas vivas y actualizadas que a todos nos instruyen. Y tu no tienes derecho de coartar la libre expresión de los demás.:001_smile::001_smile::001_smile:

  10. #10
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    Cuando María, Madre de Jesús dice: "Hagan lo que él les diga", es una expresión de sumisión y respeto.

    En ningún momento es algo que sea extraordinario, milagroso, divino.

    Pero con esto, solo nos quieren engañar. Exponiendo que por haber parido a Jesucristo y a otros de sus hermanos, según la misma Biblia.

    Ya se le quiere encumbrar a ser casi casi la esposa de Nuestro Dios, Padre Celestial. Pues ya es la Madre del Cielo.

    ¡¡Cuánta ignorancia!!

    ¡Como indirectamente blasfeman y le adjudican a Jesucristo que sea un nepotista, que mete a su familia al reino de los cielos, sin que nos demuestre porque. Solo porque fue su madre terrenal!!

    Están equivocados. Si Jesús vino al mundo, fue en una intención de humildad. Y el nacer en una persona humana, es un acto de humildad de su parte. No es un acto de nepotismo.

    Pero los religiosos saca dinero, quieren hacer dinero de todo. Con esto, solo insinúan que Jesucristo no tiene criterio y eleva a sus allegados, tan solo porque tuvieron parte en una insignificante periodo de tiempo en el mundo, con quien fuera su madre terrenal, por una decisión completamente externa o celestial

    Ya que no está en ninguna parte de la Biblia, la mención de las razones extraordinarias y milagros que hiciera, para tener el merecimiento de estar ipso facto en el Reino de los Cielos.

    Pero la ICAR y seguidores, se apresuraron a declararla diosa del cielo. Solo porque no comprenden la grandeza de este acto y la gran humildad de Jesús de nacer en los medios propios de la naturaleza, y no a través de una súbita presentación divina, que no le hubiera permitido traernos su evangelio con mayor naturalidad.

    Lo grandioso, está en lo natural. Y dejar las cosas entendidas en su natural desarrollo, que nos hacen a todos, más apegados a la humilde subiminidad de nuestro Padre Celestial y sus misiones de enseñanza en el mundo a través del más grande profeta e hijo de nuestro Padre Celestial, que ha venido del Reino de los cielos.

    Démosle a cada quien el justo valor, que más dignifica. Y no nepotisando y corrompiendo las situaciones, que solo dañan la limpieza de las acciones de la jerarquía celestial.


    Pues un pecado, conlleva a otro, como este de la creencia nepótica de Jesús, a la idolatría satánica de la Virgen María, y a la creencia de que existe la corrupción en el Reino de los Cielos, por mencionar algunas.

    P. D: I am sorry. Hoy no pude poner ni siquiera una carita sonrriente. Bueno aquí va una para los que tiene fe en un futuro con la verdad.:biggrin:

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