Esa sonrisa que nos une

[Nietzscheano]

Todos los días tomo el tren en 3 estaciones diferentes para llegar a mi destino, ya sea casa o trabajo, y todos los días me encantan esos viajes en tren porque en primer lugar se han convertido en la única forma de acortar tiempo de viaje y en segundo lugar porque me resulta placentero compartir con la gente o simplemente observarla. Ahora que venía hacia mi casa me sorprendió que dos chicos que estaban sentados frente a mí no paraban de sonreír y murmurarse cosas, en un inicio me pareció tierno ver cómo parecían estar tan enamorados y luego, debo confesarlo, sentí envidia y hasta ira porque recordé que no recordaba cuándo fue la última vez que alguien me hizo sentirme así. Decidí no darle pie a esos sentimientos negativos y simplemente dirigirles una mirada de aprobación y sonreír también. En la penúltima parada la chica de unos 18 años acomodó sus pertenencias, se levantó y simplemente se bajó sin decir adiós ni mirar atrás y eso me pareció curiosísimo porque pensé que cómo era posible que hubiera errado en mi apreciación cuando la chica se notaba a millas que se estaba diviritiendo sinceramente. Luego, de pronto y probablemente ante mi mirada inquisidora, el muchacho de unos 22 años me ve con una sonrisa que casi rayaba en la burla y me dice: Señor, límpiese la nariz, tiene un enorme moco que nos ha venido matando de la risa a mí y a esa chica todo el viaje.

[shoshi]

Todos los días tomo el tren en 3 estaciones diferentes para llegar a mi destino, ya sea casa o trabajo, y todos los días me encantan esos viajes en tren porque en primer lugar se han convertido en la única forma de acortar tiempo de viaje y en segundo lugar porque me resulta placentero compartir con la gente o simplemente observarla. Ahora que venía hacia mi casa me sorprendió que dos chicos que estaban sentados frente a mí no paraban de sonreír y murmurarse cosas, en un inicio me pareció tierno ver cómo parecían estar tan enamorados y luego, debo confesarlo, sentí envidia y hasta ira porque recordé que no recordaba cuándo fue la última vez que alguien me hizo sentirme así. Decidí no darle pie a esos sentimientos negativos y simplemente dirigirles una mirada de aprobación y sonreír también. En la penúltima parada la chica de unos 18 años acomodó sus pertenencias, se levantó y simplemente se bajó sin decir adiós ni mirar atrás y eso me pareció curiosísimo porque pensé que cómo era posible que hubiera errado en mi apreciación cuando la chica se notaba a millas que se estaba diviritiendo sinceramente. Luego, de pronto y probablemente ante mi mirada inquisidora, el muchacho de unos 22 años me ve con una sonrisa que casi rayaba en la burla y me dice: Señor, límpiese la nariz, tiene un enorme moco que nos ha venido matando de la risa a mí y a esa chica todo el viaje.

Cada persona vive su realidad, que es distinta de lo real, por éso los testigos de un accidente de tránsito llegan a dar versiones distintas de lo sucedido.
Hay quienes dicen que la imaginación humana es lo que verdaderamente nos diferencia de los animales, y fue la suya la que produjo la equivocación de Nietzscheano.

iEl mundo de las imágenes!... iCómo muchas veces nos hace equivocar en la comprensión de los sucesos, en la apreciación de las actitudes o intenciones de las otras personas con las que interactuamos!

[shoshi]

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Acorde a sus estilos, Pablo Picasso y Salvador Dalí pintarían un huevo real de distinta manera, pero ambos compartirían la misma acción de pintar, el placer de plasmar su vocación, de manifestarse.

Compartiendo ambos nuestro foro (en el que hay suficiente lugar para todos), los usuarios Rusko y Mango Martini dieron hace pocas horas testimonio de sus opuestas interpretaciones sobre unos mismos escritos.

En el tren, una sonrisa unió a Nietzscheano con los otros dos pasajeros.

[shoshi]

____________________________________ Y considerando las palabras de este gran poeta lirico romano, yo soy partidaria de ser feliz sin camisa o con camisa pero en ambos casos respetando a todos los otros.

[Nietzscheano]

Hola Shoshi, gracias por los aportes.

Aclaro que el tal moco existía sólo en la mente del escritor, no vayan a pensar que andaba yo dándole un tour al moquito éste

Siempre me ha gustado retratar la realidad de la forma más veraz posible sin embargo tengo plena consciencia de que la descripción de la realidad puede ser pesada e incluso aburrida y por eso trato de incluir algo de hilaridad en mis escritos. Recuerdo haber leído "María" de Jorge Isaacs a mis tiernos 13 años y si bien me encantó la lectura, habían momentos en los que me aburría terriblemente debido a las descripciones paisajistas interminables del autor.

No sé si recuerdan al usuario Zamiel, sus textos me parecían la mezcla excelente de hilaridad y realidad. Y agregada su nata excentricidad, la cosa era simplemente genial. Una lástima que se haya ido.

Los dejo con algo para que sonrían: