Ayer vi ganar a esta mujer, que digo mujer, MUJERÓN! Quién dijo que los hombres son más fuertes que las mujeres? Fuerte y guapota!



Lidia Valentín, campeona del mundo de halterofilia.

Oro olímpico en Londres y tres veces oro europeo, la leonesa se corona como reina de la disciplina: "He conseguido lo que soñé cuando era pequeña"



La española Lidia Valentín, que en la madrugada de este lunes se proclamó campeona del mundo absoluta de halterofilia en la categoría de hasta 75 kilos, aseguró que estaba viviendo un sueño "tras una competición increíble", en la que levantó un total de 258 kilos.

En el Centro de Convenciones de Anaheim (California), envuelta en una bandera de España, con las tres medallas de oro (arrancada, dos tiempos y total) colgadas al cuello y una muñeca de "Minnie" en los brazos —compitió al lado del primer parque de Disneyland—, la deportista leonesa mostró su emoción, tras coronarse como la mejor de la categoría, haciendo buenos los pronósticos y coronando una carrera en la que ya cuenta con un oro olímpico (Londres 2012), una plata olímpica (Pekín 2008), un bronce olímpico (Río 2016), y tres oros europeos (2014, 2015 y 2017).

Es la primera vez que una halterófila española gana una medalla de oro en un mundial absoluto, ya sea en categoría femenina o masculina, y ella lo ha hecho hasta en tres ocasiones. La primera de las medallas la logró en la arrancada, en la que no tuvo rival alguna, ya que, con el primer intento de 110 kilos se proclamó campeona en esta modalidad al superar en 2 kilos a la segunda clasificada, la ecuatoriana Neisi Patricia Dajomes Barrera.

Con una seguridad aplastante, Valentín acudió a la barra para levantar de forma espectacular 115 y 118 kilos en su segundo y tercer intento, respectivamente. Con una diferencia de 10 kilos con respecto a Neisi tras la arrancada, Valentín tenía serias opciones de llevarse el título mundial, pero antes tenía que pasar por los dos tiempos. En esta prueba la española tuvo un poco más de competencia, pero eso no fue impedimento para que también se hiciera con el oro con 140 kilos.

En el primer intento levantó 130 kilos y pudo con los 135 en el segundo.Con esto, Lidia ya se convertía en campeona del mundo, tanto en dos tiempos como en total olímpico, y conseguía su tercera medalla de oro, y la más importante de las tres. No quiso renunciar a su tercer intento, pese a que ya no le hacía falta, y solicitó 140 kilos. De nuevo un silencio asombroso y, cuando Lidia hizo el movimiento válido el pabellón empezó a rugir como si de una halterófila local se tratase, y se vino abajo cuando hizo su gesto característico: el corazón con las manos.

El País.