Amigo Doomga, tu llevas las cosas a un extremo y a unos límites
Obviamente, porque en los extremos y en los límites es donde aparece el verdadero hombre que tienes dentro.
Que un asaltante mate a tu hijo no es nada del otro mundo: ocurre en todas partes, a toda hora, y en todas las sociedades.

Los cristianos podemos defendernos de muchas formas, pero lo que no podemos hacer es, que cuando tu hayas vencido a tu enemigo, lo mates.
Hay quienes dejan morir a sus hijos porque les deniegan la salud.
Otros los dejan morir porque les deniegan la defensa.