Jesus pago el precio de rescate para librarnos de pecado
29 Al día siguiente contempló a Jesús que venía hacia él, y dijo:
“¡Mira, el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo!
Jn 1:29
Jesus dio su carne
para librarnos de pecado
(Juan 6:51)
Yo soy el pan vivo que bajó del cielo;
si alguien come de este pan vivirá para siempre;
y, de hecho, el pan que yo daré es mi carne
a favor de la vida del mundo”.
(1 Juan 2:2)
Y él es un sacrificio propiciatorio por nuestros pecados,
pero no solo por los nuestros,
sino también por los de todo el mundo.
(1 Juan 4:14)
Además, nosotros mismos hemos contemplado
—y de ello estamos dando testimonio—
que el Padre ha enviado a su Hijo como Salvador del mundo.