kimo no se quiere dar por enterado de que Dios no quiere sacrificios ni nunca los mandó.
Contradices a Jesucristo, que enseñó que Dios no quería ni quiere sacrificios y Él hizo la voluntad del Padre. Así que NO debes llamar sacrificio a Jesucristo porque contradices lo que Él enseña en el Evangelio.