Es válido que no te guste, lo que no es válido es que no quieras hacerlo por sentirte "menos hombre".
Si no te gusta por que te duele, o por que realmente no te da placer, el debe respetarte y aceptar que contigo sólo será pasivo, ya que debe ser conciente que todos somos diferentes, a algunos les gusta ser penetrados, a otros les es indiferente y otros no lo soportan.
Así que te recomiendo que le pongas las cartas sobre la mesa. Nadie vale tanto la pena.