Es un pasatiempo, entretenido y divertido.
Con algunos juegos, como los shooters o los de conducción, mejoras tus reflejos, con otros desarrollas tus habilidades estratégicas. Puedes sentir, en parte, la emoción de jugar un partido con tu equipo de fútbol favorito, o encarnar a las superestrellas de la NBA, dirigir ejércitos, liarte a tiros contra zombies, conducir un coche atropellando a todos los peatones que salen a tu paso.

Divertirse, es lo importante.