Libertad

Hasta el último segundo, no pude creer que tan sólo unas cuantas puertas metálicas, automatizadas y videovigiladas que empezaban a abrirse, me separaban de un cielo mucho más azul que antes, una increíble visión que me llegó de golpe, anunciándome al fin, esa tan ansiada libertad que ya nunca parecía existir para mí...

Heredo la palabra: Resiliencia.