A mí me pasó al revés, estaba fumando mal (sin tragar el humo) y no le encontraba la gracia (inclusive me desagradaba el gusto), hasta que una amiga tuvo la maldita idea de enseñarme a fumar inhalando el humo y ahí no pude parar. Por suerte lo pude dejar hace un par de años y no volvería a fumar nunca más, no lo extraño, es horrible.