No tengo ninguna firma que leer, ni leer entre líneas, ni ver cosas invisibles... simplemente respondo a un comentario directo hacia mí, que por cierto me escribiste sin haberte yo dirigido la palabra ni directa ni indirectamente.
No contenta con eso hacés un comentario de lo más desubicado diciendo que ese primer reclamo (también desubicado) lo hiciste pensando en mí ¿¿??... ¿Quién sos? ¿Qué tenés que decir de mí? ¿Quién te conoce?. ¿Quién está meando fuera del tarro?.
Y encima cuando te respondo te hacés la ofendida. Qué ridiculez.