Tenemos diferentes opiniones sobre lo que es bueno y malo. Influye la cultura, la religión, la política, la tradición y también las decisiones personales.
No cabe duda que lo bueno y lo malo depende de la cultura y la religión y otros factores del entorno.

Para un esquimal, por ejemplo, es bueno y educado que tú duermas con su mujer (si eres huesped), para que estés calentito.
Lo mismo no sería bien visto en un hogar de miembros del opus dei (para poner un ejemplo).

Pero cada persona, en su entorno, sabe perfectamente qué es lo correcto, y qué no.