Iniciado por
Elisabet*
Eso significa que los que no sabían que lo que Dios quiere es la misericordia, antes de que Jesús les hablara no eran conocedores de lo que Dios quería, por tanto no eran culpables. Pero después de que Jesús les habló ya eran conocedores de que lo que Dios quiere es la misericordia, y entonces ya no tenían excusa si seguían faltando a la misericordia.