24 Por consiguiente Juan dice: "y procedentes del humo salieron langostas sobre la tierra; y se les dio autoridad, la misma autoridad que tienen los escorpiones de la tierra. Y se les dijo que no dañaran ninguna
vegetación de la tierra ni cosa verde alguna ni árbol alguno, sino solo a los hombres que no tienen el sello de Dios en la frente."
Tales hombres no estaban sellados o grabados con el espíritu de Dios, y
por eso no producían el fruto de Su espíritu sino que eran cristianos falsos, israelitas espirituales falsos.
Los testigos cristianos ungidos de Jehová que son representados por las langostas procedentes del humo del abismo administran a éstos un dolor aguijoneante, abrasador, semejante al que infligen los escorpiones.
¿Cómo? Por medio del mensaje de juicio que proclaman estas "langostas."