No lo dude nunca: obedecer a Dios siempre será para su bien.
Es vital que pongamos toda nuestra fe en aquel
que puede ayudarnos mejor que nadie.

Pablo nos recuerda que Jehová es el único
que tiene el poder de
“hacer más que sobreabundantemente en exceso”
las cosas que le pedimos (Efes. 3:20).

Los cristianos nos esforzamos al máximo
por hacer lo que agrada a nuestro Dios,
pero como sabemos que tenemos limitaciones,
confiamos en que él bendecirá nuestros esfuerzos.
¿No está agradecido de tener a Jehová a su lado?
¿Nos responderá a nosotros Jehová si le pedimos más fe?
La Biblia dice que sí, pero siempre y cuando
“lo que pidamos [sea] conforme a su voluntad” (1 Juan 5:14).

A Jehová lo hace sentir muy contento
que confiemos en él sin reservas.
Él nos dará fe si se la pedimos;
nos dará tanta fe que estaremos entre las personas
que serán consideradas dignas “del reino de Dios” (2 Tes. 1:3, 5).