El Reino de Dios es un gobierno. Claro está, para que se lo pueda llamar así, debe contar con gobernantes, leyes y súbditos. ¿Cumple estos requisitos el Reino de Dios? Analicemos lo que dice la Biblia.

¿Quiénes son sus gobernantes? Aunque Jehová Dios es el Soberano Supremo, ha dejado el Reino en manos de su Hijo, Jesucristo (Isaías 33:22; Mateo 28:18). Guiado por su Padre, Jesús ha elegido a un número específico de personas de “toda tribu y lengua y pueblo y nación” para “reinar sobre la tierra” con él (Revelación 5:9, 10).

¿Cuáles son sus leyes? En este Reino hay dos tipos de leyes, o mandamientos. Por un lado, unas indican lo que se debe hacer. Con relación a estas, Jesús dijo cuáles eran las dos más importantes: “‘Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente’. Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo, semejante a él, es este: ‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo’” (Mateo 22:37-39).