Historias verdaderas... pero ridículas.

[JoseAntonio1]

Felipe IV el Hermoso, rey de Francia, tuvo una hija llamada Ana Isabel, una mujer muy bella, y la casaron con Eduardo II de Inglaterra; un reconocido homosexual. Ella le toma rabia a su marido y con su amante Roger de Mortimer, se van a Francia, en donde reclutan un ejército, e invaden Inglaterra haciendo prisionero a su propio esposo. El 21 de septiembre de 1327, Eduardo fue asesinado por ordenes de la esposa, luego que es empalado por el recto, con un hierro al rojo vivo en el castillo de Berkeley. El cadáver que no tenía señales de violencia, fue mostrado al público, como si nada le hubieran hecho, y enterrado.