Se ha conocido hoy, que la Reina de España no concurrirá a no se sabe bien que festichola de celebración de la Reina de Inglaterra. Fuentes generalmente bien informadas, señalan que el desaire se realiza como señal de protesta por la presencia de algún principe inglés en Gibraltar, territorio ocupado por el colonialismo británico y reclamado -ma non troppo- desde hace años por España. Tal presencia, mas la amenaza sobre pescadores españoles en aguas en disputa -ma non troppo-, serían los motivos del no-viaje. Otras fuentes -siempre hay de esta clase-, indican que además no querría dejar solo al rey.
La noticia, que según las primeras fuentes fue decisión de la casa real, aunque la casa real afirma que fue una sugerencia del gobierno de Rajoy, aunque fuentes del gobierno de Rajoy dicen que no hubo tal cosa y fue decisión real, aunque nuevas fuentes reafirman lo primero para que otras ratifiquen lo segundo, bien, la noticia cayó mal en Inglaterra, hasta el punto de que el jefe de personal del secretario de Cameron, con profunda consternación, ha dicho que estas cosas no se hacen.