¡Hola Rosita! Vengo a visitarlas en su hermosa casita. ¡Me alegró mucho encontrar aquí los paisajes que les regalé, tanto que una sonrisa de larga duración traigo en el rostro!

¡Oh! pero no vengo con las manos vacías, traigo una lámparita para que decoren su casa.


Asi que... ¡Cuénten mi primer visita, que quiero una sombrilla!