Iniciado por
JoseAntonio1
Hola Socorp, ese comentario de no sentarte a tomar un cafe en Venezia me hizo reir muchisimo. Resulta que el año pasado fui con mi chavalo(hijo) estudiante, a Venezia. En el hotel nos dijeron que estaba permitido sentarse a pinicquear donde tu quisieras en la ciudad, con tal que no dejes basura cuando terminez. En efecto, que asi vi algunos turistas disfrutando de su picnic a las orillas de alguno que otro canal. Pues un dia de tantos, compre una botella de champan helada en un supermercado y nos fuimos con unos chorizos, unos quesos y unas baguettas a disfrutar una tarde en la plaza de San Marcos. En dicha plaza habian dos cafes con mesas en la plaza, y por cierto con musica en vivo y todo muy proper y elegante. Mire los precios y te cobraban algo asi como 30 dolares solo por sentarte(cover charge), sin incluir lo que pidieras de alli en adelante. Entonces dije "hijo, tendremos un picnic sentados en unas gradas alrededor de la plaza porque esto es extorsion". Bueno, nos sentamos y abri la botella de champan frio y espumante, comenzamos a preparar unos sanwiches, vinieron las palomas y se amontonaban hambrientas frente a nosotros. Eran tantas que se armo todo un espectaculo, y los turistas vinieron a tomarles fotos. Ya me habia tomado media botella del liquido espumante, cuando de repente toda esta harmonia celestial, es interrumpida por un brusco grito en Italiano que no entendi. Las palomitas salieron huyendo, a mi se me derramo el vaso que tenia en mano del susto, y las camaras con los turistas se esfumaron. Solo quedamos mi hijo, yo y un furioso tendero quien me empezo a hablar en Ingles, ya que penso que yo era Ingles, talvez porque mi hijo es bien blanco. En ingles me dice: "Usted no haria eso en Inglaterra, ¿porque lo hace aqui?, para eso esta el cafe de enfrente, para comer y beber ahi". Sintiendome muy apenado, le trate de explicar que segun el hotel no iba a haber problema. Luego aparece la policia y me regañan por darle de comer a las palomitas. Parece que quebre todas las leyes de la decencia en dicha ciudad por querer ahorrarme unos cuantos dolares. Pero aparte de esta desafortunada anecdota si que fue un viaje placentero.
Bye,