Como alguien de 53 años, acostumbrado a una niñez de años de cuatro estaciones, y a las estaciones de características específicas, veo cada vez más preocupado los cambios que están aconteciendo a nivel del clima.

Y preocupado porque estoy viendo que el mundo que heredarán nuestros hijos y nietos no será el mismo que vivimos nosotros, inundaciones, sequías, alertas meteorológicas, ya son cosa de casi todos los días. El cambio climático nos está golpeando el rostro y me da miedo el pensar en lo que le estamos dejando a las próximas generaciones...