Llega un indio con el gran jefe toro sentado y le dice:
Gran jefe, mí querer cambiar nombre.
A lo que el gran jefe toro sentado le contesta:
Muy bien, como tú llamar.
Mí llamar viento veloz.
Ah, y cómo querer llamarte.
Yo querer llamarme aire acondicionado.


UNO DE FUNERALES