Jehová no solo ha provisto cosas materiales para provecho del hombre.
También se ha distinguido como Autor y Preservador de la Biblia, su propia Palabra.

La humanidad necesita esta maravillosa provisión espiritual, pues, citando a Moisés, Jesucristo dijo:
“No de pan solamente debe vivir el hombre, sino de toda expresión que sale de la boca de Jehová.”
(Mat. 4:4; Deu. 8:3; 2 Tim. 3:16, 17)

El hombre imperfecto no puede dirigir sus propios pasos con éxito
por medio de simple sabiduría humana.
Verdaderamente ciertas son estas palabras de Proverbios 20:24:
“De Jehová son los pasos del hombre físicamente capacitado.
En cuanto al hombre terrestre, ¿cómo puede él discernir su camino?”
El favor de Dios descansa en los que reconocen que dependen de él y él los dirige,
satisfaciendo sus necesidades espirituales, así como observó el salmista David:
“Por Jehová los mismísimos pasos de un hombre físicamente capacitado han sido preparados,
y en su camino Él se deleita.”—Sal. 37:23.