Una pena que se haya cerrado el hilo.
Pero las intervenciones que pude leer muestran que hay quienes no aprenden nunca y, al parecer, nunca aprenderán.

La incapacidad emocional de de algunos personajes, y el odio parido que manifiestan en sus dichos no se resuelven cerrando hilos, si bien comparto que la cerradura es una alternativa disponible.

Me volvió a la mente un cuento de barrio.

Le dice don otto a su amigo Fritz.
>>"Oye fritz, le dice, la semana pasada sorprendí a mi esposa fornicando con el lechero en el sofá de la sala".
<<"supongo que tomaste tu pistola, y los perforaste a tiros
>>"nooo, no me ensucio las manos con sangre por algo tan banal"
<<"y qué hiciste, otto"?
>>"pues, vendí el sofá"