Hay estudiosos de esta celebración que la han rastreado hasta Babilonia ... la de tiempos del Nemrod bíblico. Según sus conclusiones, la celebración tenía que ver con recordar a los muertos del Diluvio, especialmente a los hijos de los ángeles materializados con las mujeres, que al no poder desprenderse de sus cuerpos de carne (como sí pudieron hacer sus padres angelicales) terminaron ahogados junto al resto de la humanidad.

O sea que, en realidad la celebración la originaron los ángeles que desobedecieron a Dios y se hicieron cuerpos para acostarse con las mujeres, al volver a desmaterializarse y regresar a un planeta repoblado ... para recordar a sus hijos muertos por Dios junto al resto de los humanos ahogados. Los siervos de Dios no deseamos participar en esa clase de recordatorios.