La Biblia es la colección de libritos inspirados por Dios, y aquellos texto muestran que sus escritores no hablaron o escribieron por su cuenta, sino que lo que dicen proviene de Dios.
Incluso su propio Hijo, lo testifica:
Juan 14:10 “Las cosas que les digo a ustedes no las hablo de por mí; sino que el Padre que permanece en unión conmigo está haciendo sus obras.”