Dios no es una energía.
El vocablo "Espíritu" que se halla en Juan 4:24 es un sustantivo masculino singular, diferente de "energía", femenino singular.
También se habla de Dios como "Persona Varonil de Guerra (Éxodo 15:3)".
El profeta Isaías contempló en una visión a Dios "sentado en un trono excelso y elevado (Isaías 6:1)": ¿desde cuándo una "energía" posee un trono o reino?