Todos somos creyentes en algo, vale.
Pero ahora estamos hablando de lo que estamos hablando, de creer en algo metafísico, de un ser omnipresente, de un Dios que se contradice en distintas ocasiones en el libro del que hablas, La Biblia.
Que unas veces es cruel hasta límites insospechados y en otras ocasiones te habla de bondad, de perdonar todo y de poner la otra mejilla y sintiéndolo mucho yo al menos no puedo pasar de largo estas contradiciones tan evidentes así como así. Porque si lo hiciera me engañaría a mi mismo ¿ comprendes?
No estamos hablando de que mañana vayamos a una entrevista de trabajo y tengamos fe de que la cosa vaya a salir bien.