Según puede observarse, las grandes potencias insisten en seguir dilapidando inmensas sumas de dinero en cohetes y viajes espaciales.
¿De que sirvió el costosísimo proyecto Apolo que llevó al hombre a la Luna en el siglo pasado? ¿Mejoraron las condiciones de vida aquí en la Tierra después que trajeron todo ese montón de rocas lunares?
Tres cuartas partes de la superficie terrestre están cubiertas por agua; a pesar de esto hay países que sufren graves sequías. ¿Qué está haciendo la comunidad científica mundial para remediar esa situación? ¿Por qué no aplican su ciencia y su tecnología para desalinizar una parte del agua de los océanos e irrigar con ella a las naciones que la necesitan con urgencia?
Lamentablemente no tienen ningún interés en utilizar sus conocimientos a favor de la humanidad. Más bien han preferido desperdiciar estúpidamente sus recursos técnicos, su tiempo, y su dinero para enviar cohetes y estaciones orbitales al espacio sideral, y traer piedras de donde sea.
En Norteamérica, Rusia, Francia, y otros países que están dentro de la conquista del espacio, la gente común trabaja muy duro, día y noche, para poder ganarse el sustento, y encima de todo ese ajetreo tienen que soportar que sus gobiernos les cobre también una serie de impuestos abusivos, tan sólo para que sus científicos se den el lujo de mandar a varios astronautas a dar saltos y paseitos en el espacio o en la Luna…!
No conformes con tal despilfarro, ahora están planeando una expedición con destino hacia otros planetas.
Mis amigos, efectuar un viaje interplanetario debe costar billones de dólares. ¿De dónde sacarán esa suma super-astronómica?
Obviamente de los impuestos que a disgusto pagan los ciudadanos contribuyentes de cada nación. Esa cantidad se convertirá como siempre en humo, fuego, y chatarra cósmica; traerán más y más rocas, y después de unos cuantos años se les ocurrirá otro proyecto oneroso. ▄