Una de las zonas más sensibles del cuerpo es la piel del rostro, ella recibe directamente los rayos solares, la humedad, la lluvia, polución y cualquier otra inclemencia que hace que se marchite, manche o pierda elasticidad antes que cualquier otra zona del cuerpo. Los cuidados a la piel del rostro deben comenzar desde jóvenes, protegiéndola con protectores solares que hacen que se mantenga fresco y terso por más tiempo; al comenzar la madurez, cambian los procesos hormonales y se manifiesta directamente en la calidad de la piel, por lo que hay que buscar protectores solares más específicos para pieles maduras o dañadas por los elementos. Puedes ingresar en la web onlyfarma.com/23-proteccion-solar y aquí puedes comprar productos para todo tipo y condición de piel.