Va de terápia.

Hace años, estaba tratando a una señora francesa que unos meses antes había tenido un accidente de circulación en el cual el coche de detrás se había empotrado literalmente contra el suyo y le habían quedado muchas secuelas.

Como estaba contenta de las terapias, un día me preguntó si podía hacer algo por su hija, casada y con dos niños, sin especificar nada más. Le contesté que necesitaría una foto para ver lo que se podría hacer.

Esto era en Junio y no me pudo traer la foto hasta Setiembre. La cogí entre mis manos, me concentré durante un rato, y luego le dije algo así como: "Su hija nació tan prematura que el sistema nervioso no habia acabado de madurar, por ello, cabe esperar que de vez en cuando tenga episodios de descontrol producidos por un sentimiento aterrador que la invade y que no puede controlar, y que sus hombros estaban echados hacia delante y que le oprimian el pecho y con ello disminuían la capacidad pulmonar, haciendo que en ocasiones el aporte de oxigeno al cerebro fuera insuficiente".

La pobre mujer durante un rato quedó como una piedra de sorprendida, pareciendo que ni respiraba. Cuando pudo hablar dijo que era exactamente aquello que había ocurrido y que le pasaba a menudo.

Le dije que cuando pudiera la trajera que se podría mejorar mucho, y así lo hizo, obteniendo unos resultados, no totales, como ya se preveía, pero si satisfactorios, hasta el punto que la frecuencia de los episodios y la intensidad se redujeron notablemente.