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Tema: Influencia de los conquistadores en el judaísmo y cristianismo

  1. #1
    Fecha de Ingreso
    10-septiembre-2019
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    326

    Predeterminado Influencia de los conquistadores en el judaísmo y cristianismo

    ¿Saben qué influencia tuvieron en el desarrollo del judaísmo y la creación del cristianismo los siguientes conquistadores?


    • Nabucodonosor
    • Ciro el Grande
    • Alejandro el Magno
    • Antíoco Epífanes
    • Octavio Augusto



    Quien no sepa responder de memoria esa pregunta, no sabe religión.

  2. #2
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    10-septiembre-2019
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    Predeterminado

    Antes de que Nabucodonosor mandara al destierro a los hebreos, la religión de Yahvéh no tenía mucho peso. Se adoraba a Astarté.


    Astarté (en fenicio 𐤀‏𐤔‏𐤕‏𐤓‏𐤕‏ [ʔštrt], ʾAshtart) es la asimilación fenicia-cananea de una diosa mesopotámica que los sumerios conocían como Inanna, los acadios, asirios y babilonios como Ishtar y los israelitas como Astarot.

    Representaba el culto a la madre naturaleza, a la vida y a la fertilidad, así como la exaltación del amor y los placeres carnales. Con el tiempo, se tornó también en diosa de la guerra y recibió cultos sanguinarios de sus devotos. Se la solía representar desnuda o apenas cubierta con un fino cinturón, de pie sobre un león.

    Astarté es equiparada en nombre, origen y funciones con la diosa Ishtar de los textos de la Mesopotamia. Otra transliteración es ’Ashtart.

    En griego Αστάρτη (Astártē)
    En la época helenística (siglos IV a I a.c.) cuando los griegos se asentaron en Oriente Próximo, asimilaron a Astarté en parte con la diosa Afrodita y en parte con Deméter.
    En hebreo se llamaba עשתרת (transliterado Ashtóreth):
    Astoret es el nombre peyorativo hebreo correspondiente a la diosa feniciocananea y que llegó a ser adorada por los judíos, en Samuel 7:3 éste dijo entonces a toda la casa de Israel: «Si ustedes se vuelven al Señor de todo corazón, dejen de lado a los dioses extraños y a las Astartés que hay en medio de ustedes; dirijan sus corazones hacia el Señor y sírvanlo sólo a él. Así el Señor los librará del poder de los filisteos». En la Biblia hebrea a menudo se la presenta como el complemento femenino del dios El (Baales) (Jue 2.13; 10.6; 1 S 7.3, 4; 12.10) y se la conoce también con el nombre de Asera o Ashêrâh (Jue 6.25; 1 R 18.19). Como su culto se basaba en la prostitución (tanto masculina como femenina), se cree que el nombre Astoret es una forma hebrea del nombre semítico Astarté modificado por los hebreos con las vocales de la palabra bōshet (‘abominación’).
    Su nombre suele encontrarse en el Antiguo Testamento en la forma plural Astaroth.
    En ugarítico ‘ṯtrt (también ‘Aṯtart o ‘Athtart).
    En acadio DAs-tar-tú (también Astártu).
    En etrusco Uni-Astre (según las tablillas de Pyrgi).
    Astar: diosa de Abisinia (actual Etiopía).
    Athar: dios de la fertilidad y la lluvia en la Arabia del sur.
    Ishtar: diosa de Mesopotamia.
    Inanna: diosa sumeria del amor, la naturaleza y la fertilidad.

    Todas ellas estaban identificadas invariablemente con el lucero del alba o planeta Venus.




    De acuerdo con el libro The Early History of God, Astarté sería la encarnación correspondiente a la Edad de Hierro (después del 1200 a. C.) de la diosa Ashera, de la Edad de Bronce (antes del 1200 a. C.).

  3. #3
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    Predeterminado

    Baal (en semítico cananeo ��‏��‏��‏‏ [baʕal], «amo» o «señor»; en hebreo, בָּעַל‎ [Báʿal]; en árabe, بعل [Ba,al]) es una antigua divinidad de varios pueblos situados en Asia Menor y su área de influencia: babilonios, caldeos, cartagineses, fenicios (asociado a Melkart), filisteos, israelitas y sidonios. Era el dios de la lluvia, el trueno y la fertilidad.

    Por otra parte, Moloch Baal se trata de un dios de origen canaanita que fue adorado por los fenicios, cartagineses y sirios. Era considerado el símbolo del fuego purificante, que a su vez simboliza el alma. Se le identifica con Cronos1​ y Saturno.[




    Familia

    Su dios padre es El. En la mitología cananea se denominaba así (El) a la deidad principal. Se lo conocía como «padre de todos los dioses», el dios supremo, «el creador», «el bondadoso». Por lo general, El se representa como un toro, con o sin alas. También se lo llamaba Eloáh o Elah y su esposa principal era Asera (Astarté, Athirat o Ishtar), diosa madre de Baal.

    Su hijo Baal era representado como un joven guerrero, pero también como un toro joven (un becerro). En el templo de El-Il-Dagan (en Ugarit), Baal y el dios El estaban juntos.

    La consorte de Baal en Ugarit era la diosa Astarté (o Anat). Esta diosa recibía el nombre de Tanit en la ciudad antigua de Cartago.

    Uno de los hermanos de Baal y dios rival, es el dios semítico del caos y las tempestades, llamado Yam, cuyo culto rivalizó con el culto a su hermano de Baal, ambos hijos del dios principal El. También, ambos formaban parte de su corte de dioses menores, llamada Elohim




    El combate entre Baal y Mot

    Mot resuelve no someterse a Baal, en represalia por la derrota de Yam. Mot es el dios de la muerte y del inframundo (la palabra mot en hebreo, מות, significa muerte). Baal, sorpresivamente, se rinde ante Mot, y acepta descender al inframundo para morir, bajo la condición de que siga habiendo fertilidad en la tierra de los humanos. La mitología ugarítica explicaba la muerte como el ser "tragado" por las fauces del hambriento Mot, y Baal, aún siendo un dios, estaría sometido a esta misma mortalidad.

    Baal desciende al inframundo y muere, lo cual genera los lamentos de El y Anat, aunque Anat sospecha que El y los demás dioses secretamente se alegran de la muerte de su esposo. Como sea, con Baal muerto hay que buscar quién lo reemplace como rey de los dioses, y El elige a Athtar. Este dios, sin embargo, se comprueba incapaz para ejercer esta función, lo cual deja a Mot como el único posible heredero al trono. Un eventual reino de Mot conllevaría la extinción de la vida en la tierra, y por eso Anat decide ir a rescatar a su difunto esposo Baal del vientre de Mot, para así hacerlo regresar a la vida.

    Cuando, en efecto, Anat desciende a luchar contra Mot y lo mata, logra revivir a Baal, lo cual alegra a los dioses de Safón, especialmente a El, que veía con preocupación un reinado de Mot. Anat, junto con Shapash, buscan el cuerpo revivido de Baal. Baal, no obstante, no puede subir al trono inmediatamente, sino que debe luchar contra Mot para ganarse su título (Mot, como se ve, muere y no muere, lo cual es típico de la teología de Ugarit).

    Se siguen varios enfrentamientos encarnizados entre Baal y Mot, hasta que el debilitado Mot se rinde, aconsejado por Shapash. El subtema culmina con un himno de alabanza a un dios (posiblemente Baal o Shapash) al final de la tabilla KTU 1.6


    Amorreos
    Baal era ya venerado en el III milenio a. C. por los semitas amorreos; su nombre propio era Hadad (con sus variantes Adad, Haddu, Addu, Had, Ad). Ese culto fue introducido en Egipto aparentemente por los hicsos (pueblos de origen semita que hacia el siglo XVIII a. C. reinaban en el delta del Nilo)

    Cananeos

    En la antigua región de Canaán no suele llover desde finales de abril hasta septiembre. Las lluvias comienzan en octubre y continúan durante todo el invierno hasta abril, gracias a lo cual crece una abundante vegetación. Se creía que los cambios de estación y los efectos subsiguientes eran ciclos producidos por los interminables conflictos entre los dioses. El que cesasen las lluvias y se marchitase la vegetación se atribuía al triunfo del dios Mot (dios de la muerte y la aridez) sobre Baal (dios de la lluvia y la fertilidad), lo que obligaba a este último a retirarse a las profundidades de la tierra. Por otro lado, se pensaba que el comienzo de la estación lluviosa indicaba que Baal había despertado a la vida, lo que era posible gracias al triunfo de Anat, su hermana, sobre Mot, permitiendo que su hermano Baal volviese al trono. La unión de Baal con su esposa, probablemente Astarté, se creía que garantizaba la fertilidad durante el año entrante.

    Los agricultores y ganaderos cananeos posiblemente pensaban que el participar en rituales prescritos —una especie de magia imitativa— durante sus fiestas religiosas estimulaba a sus dioses a actuar según el modelo representado en esas fiestas, y esto era necesario para tener cosechas y rebaños productivos durante el nuevo año, así como para alejar sequías, plagas de langostas, etc. De modo que la vuelta a la vida de Baal para ser entronizado y unirse a su consorte se celebraría con ritos de fertilidad licenciosos, caracterizados por orgías sexuales desenfrenadas.[cita requerida]

    Toda ciudad cananea debió tener su santuario en honor al Baal de su localidad. Asimismo, se nombraban sacerdotes para dirigir la adoración en estos santuarios y en los muchos lugares sagrados que se hallaban en las cumbres de las colinas cercanas y que eran conocidos como «lugares altos». Es posible que en el interior de dichos lugares sagrados hubiese imágenes o representaciones de Baal, en tanto que en el exterior, cerca de los altares, se encontraban las columnas de piedra (probablemente símbolos fálicos de Baal), los postes sagrados que representaban a la diosa Aserá y estantes de incienso.

    Uno de los textos de Ras Shamra menciona una ofrenda a la «Reina Shapash [el Sol] y a las estrellas», y otro alude al «ejército del Sol y la hueste del día».

    Cada localidad tenía su propio prefijo o sufijo en nombre de Baal, al que se solía calificar mediante un nombre geográfico, como tributo al nombre de dios. Por ejemplo, el Baal de Peor (Baal-peor), adorado por moabitas y madianitas, tomó su nombre del monte Peor. Más tarde, los nombres de esos baales locales llegaron a incorporarse, por metonimia, a los mismos nombres geográficos, como por ejemplo: Baal-hermón, Baal-hazor, Baal-zefón y Bamot-baal, para el cananeo en realidad solo existía un dios Baal.

    Egipto
    Durante la época de los hicsos, en Egipto fue identificado con Seth, un dios guerrero; también fue asociado a Montu. Pero durante la dinastía XVIII, su culto en Egipto sería denigrado.

    En la Biblia



    En la Biblia, el dios Baal es llamado uno de los falsos dioses, al cual los hebreos rindieron culto en algunas ocasiones cuando se alejaron de su adoración al Dios de Abraham, Yahvé.(ver Idolatría). Fue adorado por los fenicios junto al dios Dagón (el más importante de su panteón).

    Baal aparece unas noventa veces en el Antiguo Testamento en referencia a varias deidades. Los sacerdotes del Baal cananeo son mencionados un gran número de veces, especialmente en el libro de Primera de Reyes. Muchos estudiosos consideran que este hecho refleja el ambiente de la época en la que Jezabel intentó introducir la adoración del Baal tirio (Melkart) a la capital israelita Samaria en el siglo noveno antes de Cristo. Las escrituras hebreas mencionan un duelo entre el profeta Elías y los sacerdotes de Jezabel. Ambos bandos ofrecieron sacrificios, pero Baal no logró encender el sacrificio de sus seguidores en tanto que el Dios de Israel envió fuego del cielo que quemó el altar de Elías hasta convertirlo en cenizas, aún a pesar de que éste había sido mojado con abundante agua. Acto seguido, la audiencia siguió las instrucciones de Elías y mató a los sacerdotes de Baal, lo cual llevó a que Dios decidiera volver a enviar lluvia al país después de una fuerte sequía.

    En diversas ocasiones el texto hebreo se refiere a "los baales" (en plural) para referirse en conjunto a las estatuillas e imágenes de los diversos dioses de las religiones cananeas, posiblemente no sólo a las de Baal.

    Este nombre aparece dos veces en la leyenda de Keret descubierta en Ugarit.

  4. #4
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    Predeterminado

    Reyes de Judá


    El reino de Judá, cuya historia se relata en los libros bíblicos de Samuel, Reyes y Crónicas, tuvo los siguientes monarcas:

    Roboam
    Abías (Abiam)
    Asa
    Josafat
    Joram
    Ocozías
    Atalía
    Joás
    Amasías
    Ozías (Azarías o Uzías)
    Jotán
    Acaz
    Ezequías
    Manasés
    Amón
    Josías de Judá
    Joacaz (Salum {1Cr 3:15})
    Joaquim (Yoyaquim. Su nombre original era Eliaquim )
    Joaquín (Jeconías o Conías)
    Sedequías (su nombre original era Mattanías)

    El reino de Judá fue destruido por Nabucodonosor II quien cegó y llevó cautivo a Babilonia al rey Sedequías. La primera deportación de los habitantes de Judá fue en el año 597 a. C.; la segunda fue en el año 586 a. C.

    Cuando, siglos después del retorno del exilio, los romanos conquistaron Israel, ellos otorgaron el territorio del reino a Herodes el Grande.

    Herodes I el Grande
    Herodes Antipas
    Herodes Agripa I
    Herodes Agripa II

  5. #5
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    Predeterminado

    Primer reino de Israel

    Monarquía unificada. El primer reino de Israel estuvo formado por todas las tribus israelitas y tuvo dos dinastías:
    I dinastía (Casa de Saúl) (Gabaa)

    Saúl
    Isbaal

    II dinastía (Casa de David) (Jerusalen)

    David
    Salomón

    Segundo Reino de Israel

    Monarquía dividida. Tras la muerte de Salomón en 928 a.E.C., el reino se dividió. Dos de las tribus, aquellas de Judá y Benjamín, aceptaron como monarca a Roboam, hijo de Salomón, y por consiguiente formaron el Reino de Judá. Las tribus restantes se rebelaron contra su autoridad y erigieron un reino distinto, llamado Reino de Israel.
    I dinastía (Casa de Jeroboam I) (Siquem)

    Jeroboam I
    Nadab

    II dinastía (Casa de Baasa) (Tirsá)

    Baasa
    Ela

    III dinastía (Casa de Zimri) (Tirsá)

    Zimri

    IV dinastía (Casa de Omri) (Samaria)

    Omri (Tibni intentó ocupar el trono después del suicidio de Zimri. El pueblo de Israel estuvo dividido en dos: la mitad del pueblo seguía a Tibni hijo de Ginat para hacerlo rey, mientras que la otra mitad seguía a Omri. La lucha duro unos cuatro años. Omri salió victorioso de la lucha y Tibni fue muerto.)
    Ajab (Acab)
    Ocozías
    Joram

    V dinastía (Casa de Jehú) (Samaria)

    Jehú
    Joacaz
    Joás
    Jeroboam II
    Zacarías

    VI dinastía (Casa de Sellum) (Samaria)

    Sellum (Salum Shallum)

    VII dinastía (Casa de Menajem) (Samaria)

    Menajem (Manahem o Menahem)
    Pecajías (Pekaía)

    VIII dinastía (Casa de Pecaj) (Samaria)

    Pecaj (Peka)

    IX dinastía (Casa de mi ) (Samaria)

    Oseas

  6. #6
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    Los israelitas como nación se mostraron infieles a Jehová casi todo el tiempo. Eso fue así desde el mismísimo año en que fueron liberados de Egipto. A ellos se les dió una forma de solicitar perdón por sus continuos errores mediante el sacerdocio levítico, porque estaba previsto que como personas imperfectas nunca iban a poder ser fieles a una ley perfecta. Ellos descuidaron su relación con Dios, y lo disgustaron muchas veces.


    Aunque como nación le fallaban continuamente a Dios, desde reyes, jueces hasta sacerdotes, siempre hubo profetas fieles a Jehová, y algunos reyes que hicieron que la nación se volviera a Dios. La adoración pura a Dios no dependía de si la nación lo abandonaba o no; las leyes estaban escritas y siempre hubo personas que fueron fieles a Dios. El comportamiento del pueblo no definió ni la verdad, ni la existencia de Dios, ni la forma en que Dios debía ser adorado.


    El judaísmo pronto dejó de ser una religión dedicada a servir a Jehová de la forma que Él exigía, y se convirtió en una religión llena de tradiciones e ideas humanas. Pretendían servir a Jehová, pero ya Jehová no aprobaba la forma en que ellos pretendían adorarlo. Cuando Jesús fue hombre, quiso traer de vuelta a la nación a Jehová, pero ellos no aceptaron su mensaje, como mismo no habían aceptado el mensaje de otros enviados de Jehová, profetas fieles que enviaba con mensajes en Su nombre. Mataron a muchos enviados de Dios, y al final mataron al propio Mesías enviado de Dios.


    La forma de adorar a Dios no depende de las cosas que los judíos hicieron, sino adorarle de la forma que Él aprueba. En ese sentido, ningún "conquistador" puede afectar la relación que los fieles tengan con Dios, como ninguno pudo hacer que los fieles se mantuvieran fieles, como Daniel y los tres hebreos, Jeremías, Esdras, Nehemías y tantos más.
    2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
    Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
    ... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.


  7. #7
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    Predeterminado

    Cita Iniciado por Eli_yahu
    Ellos descuidaron su relación con Dios, y lo disgustaron muchas veces.
    Un Dios que se disgusta, que se arrepiente, que toma venganza no es ningún Dios.

    Es una réplica de un ser humano.

    Dios de existir, no tiene nada que ver con las fantasías y dolencias psicológicas que se le pretende achacar.
    Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.

  8. #8
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    Predeterminado

    Cita Iniciado por Eli_yahu Ver Mensaje
    Los israelitas como nación se mostraron infieles a Jehová casi todo el tiempo. Eso fue así desde el mismísimo año en que fueron liberados de Egipto. .
    Veámoslo desde el punto de vista antropológico: la religión de Yahvéh no fue la única que practicaron los hebreos hasta después del Destierro de Nabucodonosor.

    Ya después del destierro, entonces sí todos eran creyentes en Yahvéh. O sea que indirectamente, Nabucodonosor afianzó la religión hebrea, que sin él quizá se hubiera perdido, desplazada por el culto a Baal o a Astarté.

  9. #9
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    Durante el reinado de Josías se editó el Deuteronomio:

    Josías (en hebreo: יֹאשִׁיָּהוּ, Yošiyyáhu; Yahvéh me apoya o Yahvéh me ha sanado) fue rey de Judá entre 639 y 608 a. C., e instituyó reformas importantes. En su reinado se inició la recopilación y edición del Deuteronomio bajo el liderazgo religioso del profeta Jeremías.
    https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%ADas_de_Jud%C3%A1

  10. #10
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    Predeterminado

    Cita Iniciado por Olimak Ver Mensaje
    Veámoslo desde el punto de vista antropológico: la religión de Yahvéh no fue la única que practicaron los hebreos hasta después del Destierro de Nabucodonosor.

    Ya después del destierro, entonces sí todos eran creyentes en Yahvéh. O sea que indirectamente, Nabucodonosor afianzó la religión hebrea, que sin él quizá se hubiera perdido, desplazada por el culto a Baal o a Astarté.
    Yo no sé qué cosa sea "la religión de Yahvéh" ... Los israelitas sabían perfectamente qué Dios escogió a su antepasado Abrahám, llamó a Moisés para que los lidereara, trajo las plagas sobre Egipto y los sacó de ahí ... el mismo que les dió la ley y que mostró Su poder contra sus enemigos ... Que ellos le hayan sido infieles o no, no cambia nada de esa realidad que ellos conocían. Un hijo puede tener una buena crianza y luego convertirse en delincuente abandonando su hogar y familia. Eso no negaría la crianza que recibió.
    2Tim.3:13 (...) los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.
    Dan.11:33 Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. (...)
    ... 12:10 Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.


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