Iniciado por
tosan
Jesús dijo muchas cosas. Algunas difíciles de entender. Unas sobre el presente; otras, que sucederían después.
Hay que reconocer que tuvo una gran habilidad. Se guardó las espaldas.
Nunca podremos imputar un fallo a Jesús.
Su gran coartada: “Mi reino no es de este mundo”.
Toda sospecha de incumplimiento de promesas queda aclarada: La gran coartada.