Así lo veo también. El que tiene los medios y realmente quiere ayudar a otra persona, lo hace de forma voluntaria, y a poder ser, anónimamente.
Querer ayudar a alguien a mejorar su calidad de vida, manteniéndole su dignidad y su propia autonomía personal, hace que sin saberlo, el/la auxiliado/a nos ayude a su vez, a querer ser mejores personas.
Intentar mejorar como persona es la única clave para construir mejores sociedades, ya que sin altruismo ni empatía, una sociedad se viene abajo.
Ayudar al prójimo es un acto de generosidad y es bidireccional.
No os recuerda un mensaje primordial? El de amar al prójimo. :001_smile:
No obstante, queda claro que mientras que haya gente pidiendo y durmiendo en la calle, algo no estamos haciendo bien. Algo falla y mucho. Y eso toca ya el ámbito del gobierno y cía.
En cuanto a lo expuesto en el primer aporte, que si correcto, justo y/o justicia, sinceramente, un letrado tiene un papel bien difícil. Una cosa es la defensa, y otra, el estar de acuerdo con los hechos de su cliente, si éste es culpable. No sé si se sentirá mejor un fiscal en su papel, pero éste otro, creo que lo tiene bastante más difícil.
Me recuerda el papel del cura, que no puede decir nada de lo confesado, a pesar de posibles actos deleznables que ha debido oír de sus feligreses. Y luego, le toca aplicar una sanción de absolución, y el pobre hombre, amén de poder recomendarle al culpable que se entregue o reconozca oficialmente sus hechos, etc,... pues tiene que seguir callado y a comérselo con papas... Ufff!
Yo no valdría para eso, me temo. No pegaría ojo por las noches!!