En este caso ocurrió algo semejante a lo que ocurrió en el caso de la Miss España hombre.

La corrección política entró en conflicto con la lógica (o prejuicio, para algunos).

La actriz indígena mexicana Yalitza Aparicio lució vestidos de calidad en Vanity Fair, y no faltaron comentarios peyorativos como "Mona vestida de seda...", así como los de quienes la defendían.