Resulta muy facil, en muchos casos, encontrar el mal en todas las cosas, negandose asi a uno mismo, familiares, vecinos y amigos, momentos que, vistos del lado positivo --o Cristiano-- de la vida, serian momentos gratos, sanos, edificantes.
Podesis pasar toda tu vida arrojando a la basura los limones que te arrojan, o podeis sabiamente tomarlos y hacer con ellos una deliciosa limonada para luego compartirla y disfrutarla con tus seres queridos y con aquellos que no lo son tanto, con la esperanza de que lo sean algun dia.
El negativismo propio a los pobres tdJ lleva a una vida de enclaustramiento fisico y espiritual, un enclautramiento que no proviene de Dios.
Dan pena...!