Yo entiendo bastante de vino.
Y un vino viejo es bastante más apreciado que un vino nuevo.
Así que, concéntrate en lo que escribes, ya que lo viejo eran los odres, y no el vino.
Y, así como confundes tus propios dichos, no quiero ni imaginar la ensalada que tienes dentro de la cabeza.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.