Desde luego que no se comprende que en el mundo haya tanto odio contra Jesucristo y contra sus enseñanzas del Evangelio.
La Verdad es que no se comprende, pues los misericordiosos mandamientos que Jesucristo nos enseña en el Evangelio, son mandamientos de vida y de esperanza para las personas de buena voluntad.
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
Jesucristo no fue creado, sino engendrado del Espíritu Santo:
Mateo 1:18
El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.
1:19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.
1:20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.
Iniciado por misericordia
Desde luego que no se comprende que en el mundo haya tanto odio contra Jesucristo y contra sus enseñanzas del Evangelio.
La Verdad es que no se comprende, pues los misericordiosos mandamientos que Jesucristo nos enseña en el Evangelio, son mandamientos de vida y de esperanza para las personas de buena voluntad.
La siguiente enseñanza no es de Pablo sino de Mateo, que nos enseña que
Jesucristo no fue creado, sino engendrado del Espíritu Santo:
Mateo 1:18
El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.
1:19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.
1:20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.
Iniciado por misericordia
Desde luego que no se comprende que en el mundo haya tanto odio contra Jesucristo y contra sus enseñanzas del Evangelio.
La Verdad es que no se comprende, pues los misericordiosos mandamientos que Jesucristo nos enseña en el Evangelio, son mandamientos de vida y de esperanza para las personas de buena voluntad.