La Iglesia Católica siempre ha ansiado el poder político mundial. En este preciso momento ya ha perdido la ventaja que tenía cuando se encargaba de los asuntos religiosos de muchos gobiernos de la tierra.

Ellos saben que han perdido esa ventaja, pero aun siguen luchando por ese poder. Para comenzar a reganar el terreno perdido, tienen que volver a sembrar temor en las masas, porque si empiezan controlando a las masas, pueden dominarlas y empujarlas a actuar a su favor dentro de la política mundial.

Ese interés no tiene nada que ver con Dios ni con la salvación de las personas. Pero vamos a estar hablando sobre esto en los siguientes comentarios. Los invito a participar.