La revista norteamericana Forbes, especializada en el mundo de los negocios y las finanzas, ha realizado una investigación en la que ha descubierto a los cinco “pastores” más ricos en Brasil, basándose en datos del Ministerio Público de la Unión de Brasil y la Policía Federal. Según la información que ofrece el medio Noticia Cristiana, extractando lo publicado por la revista, algunos de los líderes se han convertido en multimillonarios.

Forbes asegura que quien ocupa el primer lugar en la lista de los pastores más ricos de Brasil es el “obispo” Edir Macedo, fundador de la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD, también conocida como Pare de Sufrir). Macedo tiene un patrimonio valorado en más de 1,000 millones de dólares, pero Forbes destaca en una nota que el gobierno brasileño estima que esta cantidad podría ser aún mayor.

El segundo es el apóstol Valdemiro Santiago, fundador de la Iglesia Mundial del Poder de Dios, que después de salir de la IURD ha logrado acumular más de 300 millones de dólares. El pastor Silas Malafaia ocupa el tercer lugar con 200 millones de dólares. La revista cita también al presidente de la Iglesia Victoria en Cristo de las Asambleas de Dios. El misionero R.R. Soares aparece en cuarto lugar, como fundador de la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios; su herencia asciende a 150 millones de dólares. En último lugar aparece la pareja formada por Estevam Hernandes y Sonia, fundadores de la Iglesia Renacer, con 80 millones de dólares.

El éxito de su autobiografía, organizado

El libro Nada que perder, del “obispo” y fundador de la IURD se convirtió el pasado 13 de enero en el lanzamiento más exitoso en la historia de la cadena de librerías Gandhi y de la editorial Planeta México, con 35.350 ejemplares vendidos en ocho horas. Lo cuenta Alida Piñón.

La biografía del “obispo” brasileño que narra la historia de cómo comenzó a predicar su fe en las calles y las plazas públicas de Brasil, hasta llegar a liderar una secta con presencia en más de 200 países, tuvo un precio de salida de 250 pesos y una tirada de 60.000 ejemplares. Los feligreses que se dieron cita en la sucursal de la avenida Miguel Ángel de Quevedo en el Distrito Federal provenían de distintas partes de la República. La mayoría, organizados desde los templos ubicados en los municipios y colonias, arribaron a la librería en camiones rentados por los propios feligreses.

El mismo sistema de la Watchtower, cuando saca un libro obliga sentimentalmente a sus afiliados a comprarlos.

¿Cuántas otras iglesitas y congregaciones no están en la misma situación sus "líderes"? incluidos los mormones y porque25.