[Pseudoveltíosis natanatórica, comentario 19]
Desde que se formaron las dos descendencias, tras la rebelión edénica, la actuación de la mixtura humano demoníaca o descendencia serpentina (en oposición a la descendencia de la simbólica “mujer” leal a Dios) ha sido especialmente agresiva y corrosiva contra la descendencia de esta “mujer”, según se desprende de la historia sagrada. La primera víctima de esta lucha fue aparentemente Abel, muerto a manos de Caín, y a este hombre fiel le siguieron algunos profetas con similar suerte. Por lo tanto, se desprende que el inicio de las hostilidades estuvo notoriamente a cargo de la descendencia serpentina, en tanto que la descendencia de la “mujer” se mantuvo largo tiempo en actitud de huída ante la confrontación. Sin embargo, en el tiempo de Abrahán, quien fue un destacado adepto a la descendencia de la “mujer”, hubo una reacción defensiva llevada a cabo por este patriarca. En el Génesis se menciona dicho caso: “Abram asentó (se sobreentiende: se asentó, él y todo su campamento) en la tierra de Canaán, y Lot (se sobreentiende: Lot, el sobrino de Abrahán) asentó (se sobreentiende: se asentó, él y todo su campamento) en las ciudades de la llanura (se sobreentiende: lejos de Abrahán), y puso sus tiendas hasta Sodoma. Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores para Jehova (se sobreentiende: Jehová, forma españolizada del nombre divino, dado por Dios a sí mismo) en gran manera” (Génesis, capítulo 13, versículos 11-13; Biblia de 1865, de Reina-Valera). “Y aconteció en aquellos días, que Amrafel rey de Sennaar, Arioc rey de Elasar, Codorlaomor rey de Elam, y Tadal rey de las gentes (se sobreentiende: rey de varias naciones cercanas), hicieron guerra contra Bara rey de Sodoma, y contra Bersa rey de Gomorra, y contra Senaab rey de Adama, y contra Semeber rey de Seboim, y contra el rey de Bala, la cual es Segor” (Génesis, capítulo 14, versículos 1-2; Biblia de 1865, de Reina-Valera). El relato sagrado continúa diciendo que el rey de Sodoma y sus aliados fueron derrotados, de manera que los vencedores se apoderaron de todas las pertenencias de los vencidos y también de Lot y su campamento, pues éste moraba al amparo de Sodoma: “Y oyó Abram, que su hermano (se sobreentiende: su sobrino Lot) era cautivo, y armó sus criados, los criados de su casa, trescientos y diez y ocho, y siguioles hasta Dan (se sobreentiende: fue en perseguimiento sigiloso contra los vencedores, al objeto de rescatar a Lot)” (Génesis, capítulo 14, versículo 14; Biblia de 1865, de Reina-Valera).