Pero tú, Señor, me rodeas cual escudo;
tú eres mi gloria;
¡tú mantienes en alto mi cabeza!
-Salmos 3:3-
En todo tiempo ama el amigo,
Y es como un hermano en tiempo de angustia.
Proverbios 17:17
No hay condenación
para todo el que cree en él,
pero todo el que no cree en él ya ha sido condenado
por no haber creído en el único Hijo de Dios.
Juan 3:18
Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra.
Salmos 121:1-2